Ilustración tomada del sitio quiencompro.com

Aranzazú Ayala Martínez

@aranhera

Tres reporteros radicados en la Ciudad de México que cubrieron las cámaras de Diputados y de Senadores, vieron que además de la cobertura tradicional en el periodismo legislativo, había muchos otros temas que se podían abordar pero necesitaban más investigación, un trabajo propio pues la mayoría de las notas sobre excesos de los legisladores que comenzaron a publicarse en algunos medios eran, generalmente, parte de una filtración. Parados frente a ese escenario dice Israel Piña, uno de los tres reporteros, “vimos una oportunidad y sobre todo una necesidad de cobertura e interés periodístico”, ahí se gestó la idea del portal QuienCompro.com.

Israel y sus compañeros lograron conjuntar un equipo de seis personas que, inspirados en el sitio argentino VozData, construyeron la versión mexicana.

La idea, explica en entrevista, consiste en buscar facturas de los gastos de los diputados y senadores, pues como plantea el reportero ya existen organizaciones dedicadas a trabajar, analizar e incluso medir el proceso legislativo, desde que se presenta una iniciativa hasta que se aprueba. Otras que sintetizan las sesiones, y hasta algunas que hablan de los problemas internos entre facciones de partidos, pero no había ninguna que se dedicara en forma a ver en qué gastan los legisladores los recursos público.

Desde hace un año, en mayo de 2014 cuando se creó el proyecto, el equipo se enfrentó a problemas logísticos. Para empezar, dice Israel, ninguno es diseñador ni programador, y no tenían recursos para hacer un portal propio. Todo ha sido trabajo voluntario, desde los programadores hasta los periodistas.

Meses después, en octubre de 2014, se inscribieron al concurso “Desarrollando América Latina”, que se hace anualmente para impulsar el hacking cívico y el mundo de las aplicaciones de tipo social. Para el concurso se propusieron mejorar la plataforma, la aplicación y rediseñar el sitio, la nueva versión fue presentada el 8 de noviembre junto con los demás concursantes. 

QuienCompro.com ganó el primer lugar de México y tercer lugar a nivel Latinoamérica, y gracias a eso pudieron vincularse con la organización civil noruega EngineRoom. Ésta tiene un proyecto llamado MaxBox, que apoya el desarrollo tecnológico de plataformas vinculadas con transparencia y rendición en todo el mundo; el portal mexicano está trabajando con esta agrupación desde enero de 2015.

QuienCompro.com funciona, básicamente, pidiendo facturas a las cámaras de diputados y de senadores, ya sea por concepto (como viáticos, peaje, papelería, etc.) o por órgano de gobierno (mesa directiva, comisiones específicas, etcétera). Las facturas se las entregan en papel por lo que primero las escanean, la convierten en un archivo PDF y después capturan la información en una base de datos, que incluye desde el nombre de la empresa, el RFC, el monto y el órgano de gobierno que hizo el gasto.

Los obstáculos

El principal problema al que se enfrenta el equipo es que el Congreso no era un sujeto obligado con la anterior Ley de Transparencia, lo que implica que si las cámaras no te entregan la información aún no podían recurrir al renombrado Instituto Nacional de Transparencia y Acceso a la Información Pública (Inai).

Israel espera que con las reformas esto termine , porque actualmente te pueden negar la información y realmente “tú no puedes hacer nada”.

El periodista explica que la unidad de transparencia en las Cámaras está a cargo de una persona que depende directamente del presidente de la mesa directiva en turno. Entonces, “prácticamente quien decide si te dan información son los de la mesa o los de la junta de conciliación política”. Pese a que han metidos recursos de revisión varias veces, ni siquiera les responden, porque todavía con las actuales leyes “no hay nada que hacer”.

Otro de los problemas que han encontrado es la partida de las subvenciones en el congreso, que son grandes cantidades de dinero que se reparten en los grupos parlamentarios y a su vez entre los legisladores.

[pull_quote_right]Algunos de los hallazgos más indignantes son tanto por absurdos como por las increíbles cantidades. Uno de los más inesperados fue una factura de un motel de paso con un monto cercano a los  600 pesos, y otra de un spa en el estado de Hidalgo, de alrededor de 4 mil pesos. También hay muchas facturas de bares y cantinas, con la hora del pago entre tres y cuatro de la mañana.[/pull_quote_right]

La ley actual tampoco obliga a los grupos parlamentarios a justificar ese gasto, y lo que hacen es un reporte muy breve de qué porcentaje se destinó a qué área. Pero la bolsa de recursos que se destina a la subvención no es cualquier cosa, tan sólo en 2014 fueron dos mil millones de pesos en este concepto, cantidad enorme de dinero del que no sabemos nada.

Israel explica que con la nueva ley de transparencia, en teoría ya van a poder darse a conocer estas subvenciones, pero la Cámara de Senadores metió un artículo transitorio que le dará un tiempo al Congreso para adaptar los reglamentos, y alargar el proceso tres o cuatro meses.

El proceso de las solicitudes no es un proceso corto, por el contrario se enfrentan con trabas que va retrasando el acceso, como cuando les responden que la ley no los obliga, o que es información confidencial o personal.

En promedio, cada solicitud de información les toma dos meses, “si bien nos va”. Además, la entrega de la información física es costosa: cada copia simple cuesta 50 centavos, y no dan las facturas digitales porque argumentan que no hay personal suficiente para escanear. Según datos de la organización Integralia, dedicada a hacer análisis del poder legislativo, el de México es el 5o Congreso más caro del mundo, y por eso el equipo de QuienCompro.com considera que es necesario transparentar sus gastos.

Israel dice que algunos de los hallazgos más indignantes son tanto por absurdos como por las increíbles cantidades. Uno de los más inesperados fue una factura de un motel de paso, que no rebasaba los 600 pesos, y otra de un spa en el estado de Hidalgo, de alrededor de 4 mil pesos. No es posible, dice, que estemos pagando este tipo de cosas. “¿Por qué estamos pagando eso cuando su sueldo es bastante grande?”. También hay muchas facturas de bares y cantinas, con la hora del pago entre tres y cuatro de la mañana.

Por ahora lo que sigue para el portal es continuar trabajando y en un futuro está la idea de replicarlo a los congresos locales.

La nueva versión del sitio, sobre la que están trabajando actualmente y esperan que esté lista en dos o tres meses, será una plataforma de código abierto. “Cualquiera va a poder hacer la misma metodología, con la misma página y el mismo código”, explica, y espera que periodistas de otros estados se sumen a esta iniciativa.