Creemos que la sociedad mexicana tiene todo el derecho de exigir democracia y elecciones limpias. En nuestro país se gastan miles de millones de pesos en las elecciones y deberían ser perfectas, no sólo no lo son, sino que son totalmente sucias, lo que es inadmisible. Compra descarada de votos, presiones a trabajadores, votos que desaparecen, resultados de las actas que no pasan correctamente al PREP.
Nosotros nos preguntamos por qué en México, a pesar de la gran inversión que se ha hecho en tener un organismo ciudadano que cuide y de la certeza sobre las elecciones, éste no ha dado los resultados esperados.
Independientemente de quien sea el ganador o ganadora, consideramos que es ya una de las demandas más sentidas de la sociedad; la limpieza del proceso electoral.
Mapachera, carrusel, urnas embarazadas y otros términos; son exclusivos de nuestro país. Dejando a un lado lo curioso del lenguaje, es inadmisible que para nosotros sea común usarlos cada vez que hay una elección, y que los mexicanos dejemos que esas palabras que bien definen la elección en México, sigan siendo usadas.
Es necesario un cambio profundo en las elecciones para que sean verdaderamente democráticas y los mexicanos podamos tener la seguridad de que cuando elegimos a un gobernante, sea en serio y sin trampas.
Si el PRI regresa, será muy difícil que la corrupción no exista, porque esa es la palabra que ha caracterizado a todos sus gobiernos.
Es hora de que exijamos con toda nuestra fuerza moral como personas honestas y que queremos un mejor país que nunca más usemos esos términos y que algún día podamos sentirnos orgullosos de que las elecciones fueron totalmente limpias y democráticas.
Ojalá algún día podamos verlo.