Luz del Rayo Cano

Estaba yo sentada en mi despacho hace algunos meses cuando mi asistente me informó que me llamaba un amigo constitucionalista de cepa cuya identidad reservo por razones obvias. 

Tiempo atrás ambos habíamos iniciado una batalla legal en contra de la designación de Jorge Benito Cruz Bermúdez como magistrado del TSJ por ser inelegible . 

Ese amparo llegó a la Suprema Corte de Justicia de la Nación y el ministro Medina Mora lo regresó al Segundo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Sexto Circuito, en el que -maletines de por medio muy al estilo RMV- la votación fue de dos votos para negar el amparo y uno por concederlo. 

Con esa derrota a cuestas (aunque con la satisfacción de que uno de los tres Magistrados Federales nos dio la razón) seguimos avante en temas de interés nacional obteniendo triunfos legales para obtener la protección federal respecto de la vacunación a menores de edad, entre otros tantos temas.

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La llamada de esa ocasión era para invitarme a combatir en la vía de amparo el nombramiento como Magistrado de Carlos Palafox Galeana, quien antes de ese momento fungía como Consejero Jurídico del Gobernador Barbosa. 

Decline la invitación porque Barbosa era colérico y no iba a permitir que se contradijeran sus designios. Amén de que los dos íbamos a terminar en el Penal de Tepexi de Rodríguez acusados de un montón de cosas sin fundamento jurídico alguno. El uso faccioso de las instituciones de procuración y administración de justicia era el sello del barbosismo que preconizaba la idea de una política aldeana y caciquil.

¿Qué tanto daño puede hacer Palafox en el Tribunal? Pensé tonta e ingenuamente en ese momento. 

Poco después vino la Reforma Judicial, un bodrio legislativo de proporciones astronómicas.

El presidente del TSJ no formaría parte del Consejo de la Judicatura por increíble que pareciera; y aún más, sería una de las tres presidencias de los tribunales que integrarían el poder judicial. A saber: Tribunal Superior de Justicia, Tribunal de Justicia Administrativa y Sala Constitucional. O sea que la presidencia del Tribunal se convirtió por un golpe de estado legislativo en una presidencia de papel dedicada a tramitar exhortos y a atender requerimientos de otros tribunales del país pero sin poder alguno. Vaya, ni su secretario particular puede designar el/la presidente del Tribunal sin aval del consejo de la judicatura . 

Luego vinieron los nombramientos: Jueza Tere Osorio, jueza Rosalva Elena Zárate (de quien se cuentan historias de corrupción cuando fue jueza 7mo penal en el caso del empresario Francisco Bernat) magistrado Joel Sánchez Roldan (incondicional de Héctor Sánchez) Vania Peñasco ( en su casa la conocen pero al parecer fue una posición para Joel Sánchez Roldan por su amistad con Barbosa cuando era juez de Tehuacán) 

Con ese consejo de inexpertos, incapaces y desconocedores del derecho administrativo, bajo el mando de de Carlos Palafox inició actividades el Consejo de la Judicatura teniendo como resultado un descontrol total del Poder Judicial. 

Por el otro lado se nombró como presidenta del Tribunal Superior de Justicia de Puebla a Margarita Gayosso quien tiene una carrera judicial de varias décadas. Pero, ¿cuáles son sus negativos? 

1. Su esposo, abogado litigante quien siempre al llegar a un juzgado amedrenta al personal diciendo “soy esposo de la magistrada Gayosso”
2. 2- Su cercanía con un juez aliado a la familia Morales Flores y su dependencia casi absoluta a Guillermo Pacheco Pulido.

¿Qué pasó? Un choque de trenes que acabó en la amenaza velada publicada por la gaceta oficial del Gobierno del Estado.

Afortunadamente a raíz de la muerte del ex mandatario las cosas parecen mejorar en el tercero de los tres poderes del Estado aún cuando el  mismo sigue sin un mando real y tan es así que la Secretaría de Gobernación de Julio Huerta se ha encargado de “dar línea” a los jueces en asuntos de Estado (Eukid N, Arturo N, Francisco N y muchos más ) . 

Ahora Palafox aparece en entrevistas casi a diario en varios medios de comunicación. En todas habla de las bondades de la reforma judicial como si tratara de legitimarse.

PENDIENTES:

La investigación al magistrado David Paz a quien Barbosa acusó directamente de aliarse a la familia Gali en el caso de la plaza Etérea ( ubicada frente a la vista )

Aclarar la situación de los jueces suspendidos por el Consejo y precisar si como se dice en “radio pasillo” por lo menos dos de ellos tienen orden de aprehensión

Dar a conocer que va a pasar con el juez sin título Alejandro Leon Flores quien vergonzosamente les ganó el amparo contra su restitución y que todavía no se sabe nada de su te adscripción

¿Qué pasará con las denuncias en la fiscalía en contra de la consejera Rosalva Helena Zárate Herrera, contra la Secretaria jurídica del Consejo Rosa Celia Pérez González (jueza del escándalo Marín / Cacho) y de una decena de jueces más por violentar los derechos de los perseguidos del barbosismo (Ojo, sin juzgar si son culpables o no)?

¿Qué va a pasar? Sin tener dotes de pitonisa va a haber una contrarreforma del poder judicial. Los equipos jurídicos del senador Alejandro Armenta (comandados por Fernando Chevalier) y del diputado Ignacio Mier (Ernesto Ramirez) ya están trabajando en ello. O sea que Palafox se regresa a la notaría de alguno de sus papás en el 2024 y así podrá seguir publicando encuestas de sabores de helados sin hacerle más daño a Puebla