Me divierte leer algunas columnas defendiendo a Carlos Palafox Galeana.
Haciéndolo ver como un héroe de capa y espada y con una blonda cabellera que le revolotea al aire mientras monta su brioso corcel blanco en su combate contra la corrupción en el Poder Judicial del Estado.
Un paladín de la justicia.
Galante con las mujeres.
Tierno con los niños.
Implacable con los malvados…
Ah no, ese era Kaliman. Perdón, me emocione.
También puedes leer: El final se acerca ya…
Haciendo creer al colectivo a través de algunas plumas a modo que todos en el Tribunal Superior de Justicia de Puebla son corruptos menos él.
Que ahora sí los jueces tienen independencia para resolver los asuntos sometidos a su conocimiento sin presión de ningún lado.
Mentira.
Mentira y más mentira.
Desde el 2010 los magistrados ya no tienen facultades para sancionar a los jueces.
Esa es potestad del Consejo de la Judicatura, amén de que con la reforma barbosista lo único que hizo el difunto ex gobernador fue crear un poder dentro de otro poder.
Me explico.
En todo el mundo en los estados democráticos de Derecho existe lo que doctrinariamente se conoce como “auto gobierno de los jueces”, es decir, los poderes judiciales manejan su propio presupuesto sin intervención del Ejecutivo.
En Puebla quien paga a los jueces y magistrados y demás empleados judiciales es la Secretaria de Finanzas.
Quien determina los periodos vacacionales de los juzgados también.
Eso de por si se venía dando y con la reforma el difunto cacique de Zinacatepec lo único que hizo fue poner a su Consejero Jurídico como titular del Poder Judicial del Estado creando al Consejo de la Judicatura como un organismo totalmente aparte del Tribunal Superior de Justicia.
A ver, de nuevo, un poder dentro de otro poder .
Veamos que ha hecho Palafox en estos meses:
¿Combate a la corrupción?
Nulo.
Ni un juez ni magistrado ha sido investigado siquiera.
Como muestra de ello está el caso de David Paz del Tribunal Administrativo, a quien Barbosa señaló directamente de beneficiar a la familia Gali en demérito de su función jurisdiccional. ¿Y qué pasó ? Nada. Ahora hasta se toma fotos con él y las presume en sus redes sociales.
En estos meses no ha habido visitas de supervisión a los juzgados .
Cero.
Ni una.
No ha habido una sola sanción emitida contra ningún empleado o funcionario judicial.
La Consejera Teresa Osorio ha dicho en público que ella no sabe qué hace ahí, qué hay muchísimo rezago y de derecho administrativo sancionador sabe lo mismo que la que esto escribe de física cuántica.
Es decir nada .
Así que la gesta heroica de Palafox contra los corruptos es una falacia.
Es una historieta .
Una copia de una película mexicana con el enmascarado de plata como protagonista.
Palafox no hace nada.
Presume a sus cercanos que él sigue manejando la Consejería Jurídica del Gobierno del Estado de Puebla, porque Jhonatan Ávalos no sabe .
Que la toma de nota en favor del sindicato de Leobardo Soto en Cholula fue una orden de él.
Que el retraso en la resolución del conflicto sindical de los burócratas es orden de él .
Que él también manda en el Tribunal de Arbitraje del Estado porque él puso a todos sus integrantes.
¿Sabrá todo eso el Gobernador del Estado, Sergio Salomón Céspedes ?
Lo dudo.
Y si hay privilegios en el poder judicial local son de él y de su gente .
Por eso las inconformidades de los trabajadores judiciales. Han sido humillados al imponer a gente ajena a la Judicatura con altísimos sueldos.
Por eso una de las cartulinas de protesta decía: “quiero ganar como las Fernandas”.
Esa es la razón de la revuelta .
¿Creé, querido lector, que los escribientes, oficiales mayores y diligenciarios hicieron paro laboral poniendo en riesgo su chamba para exigir que los magistrados hagan negocios con su cargo? Claro que no. Quien afirme eso no conoce las entrañas del Poder Judicial.
Esas columnas defendiendo a Palafox son solo patadas de ahogado.
Las protestas de los trabajadores no va a terminar. No son tontos. La mayoría son abogados con años de experiencia. Por Dios, tratar de minimizarlos o de engañarlos solo va a provocar que el Poder Judicial se incendie.
Finalmente, me preocupa el hecho de que alguien quiere apoderarse de la Judicatura para sus fines personales .
Les doy varios tips de quien puede ser :
El poder judicial está en peligro.
¿Cómo se va defender de esa embestida con un titular como Carlos Palafox Galeana?
Pobre poder judicial tan lejos de Dios y tan cerca de Palafox.