Entre todas las opciones que enlisté (y miren que disfruto hacer listas) decidí regalarme una carta. Un recordatorio.
Septiembre 1, 2021.
23:03
Espero que esta carta llegue a tiempo. No sé porqué mejor no enviarte un mail. Tal vez quería sorprenderte. Te gusta que te sorprendan.
Le doy un trago a la copa de vino y pienso en ti, en lo que has crecido en estos treinta y un años. Los primeros. Pasaste de ser una niña que no se despegaba de mamá a ser una mujer que la pasa perfectamente bien en su propia compañía. Y que sigue siendo una pegoste con su madre cuando puede. Ahora cada vez menos, pinche covid. Con lo bien que sientan los abrazos de tu má.
Pienso en las veces que tuviste miedo de decir algo por lo que pudieran pensar de ti y las veces en que no te quedabas callada ni aunque estuvieras dormida. Te encanta dormir.
Quiero decirte que sé que las cosas no siempre son como las imaginamos, pero siempre voy a estar a tu lado. |