• En el mejor de los casos, sólo se reubica al profesor involucrado

• Tan sólo el mes pasado se registraron dos casos

Josué Mota

@motajosue

En septiembre dos profesores –en casos diferentes- fueron acusados de agresiones sexuales contra alumnos, en ambos casos estuvieron a punto de ser linchados por padres de familia; ya hay sendos procesos penales contra ellos.

La Secretaría de Educación Pública (SEP) no cuenta con un perfil de contratación de profesores que, de acuerdo con la Asociación para el Desarrollo Integral de Personas Violadas, evitaría el ultraje y la violencia hacia los menores en las escuelas, tampoco ofrece apoyo legal y psicológico a las víctimas, la única medida que llega a tomar es el cambio de plantel de los docentes involucrados.

El pasado 13 de septiembre se dio a conocer que Javier Amando Huerta Moctezuma de 55 años de edad, profesor de la escuela Emiliano Zapata ubicada en la comunidad San Miguel La Toma, perteneciente al municipio de Chietla, fue consignado a autoridades judiciales por estar formalmente acusado de violar a una alumna de siete años y agredir sexualmente a otra de 10; cinco días después fue detenido Miguel Ángel Orea Torres, de 59 años de edad, profesor de la escuelas Héroes de Puebla en la capital poblana, acusado de corrupción de menores por tocar obscenamente a sus alumnos de tercer grado de primaria.

Desde el 20 de septiembre se solicitó una entrevista al secretario de Educación Pública, Luis Maldonado Venegas, o algún otro funcionario de la dependencia para conocer su posición al respecto o las medidas a tomar en estos y otros casos; sin embargo hasta la fecha no ha sido concedida. Lo único que se dijo es que la dependencia da “seguimiento a esos dos casos y a otro de un tecnológico para ver cómo sigue el caso legalmente”. Lo que siginifca que este año se han denunciado al menos tres casos de agresiones sexuales dentro de instituciones de educación públicas.

“Sólo los cambian de escuela”

Lado B conversó con un par de profesores que aceptaron contar lo que ocurre al interior de los planteles educativos pero pidieron el anonimato por temor a represalias del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) o de la SEP, y es que aseguraron que en estos casos la protección a los acusados viene de ambas partes.

Uno de los profesores narró que en la mayoría de los casos cuando un docente es acusado de algún delito sexual “sólo lo cambian de escuela, generalmente lo mandan a alguna fuera de la ciudad unos dos o tres años, luego vuelve a pedir su cambio y puede incluso regresar a la escuela donde estaba”.

El profesor declarante lleva 27 años impartiendo clases, la mayor parte del tiempo en secundarias, actualmente se desempeña como subdirector, y comenta que en los casos donde alumnos han denunciado algún tipo de abuso sexual “a veces ocurre que los papás sólo lo denuncian con el director de la escuela pero no van al Ministerio Público a presentar su denuncia, y es comprensible porque en muchos casos no quieren que se sepa que los niños fueron violados o no quieren hacer un escándalo, pero también hay otros casos en los que los papás denuncian y se mantienen presionando pero en el SNTE y la SEP sólo optan por cambiar al profesor de la escuela y esperan a ver si los papás se cansan de buscar al profesor”.

Otra profesora consultada dijo que hace unos años conoció el caso de uno de sus compañeros que estaba acusado de violar a una alumna: “ahí los papás sí denunciaron y aunque cambiaron al maestro de escuela siguieron con la denuncia pero al final el profesor les dio dinero para que desistieran de la denuncia y en esas negociaciones a veces hasta intervienen los del SNTE para que no se haga un escándalo, pero obvio eso nunca lo van a reconocer”.

La profesora señaló que también ha conocido de casos en que se han hecho acusaciones falsamente con la intención de perjudicarlos, pero sin importar cuál sea el caso, lejos de investigar las autoridades de la SEP se limitan a cambiar de escuela a profesor involucrado.

“Yo he sabido de al menos tres casos en que profesores que han sido mis compañeros han sido acusado de seducir a sus alumnas y en los tres ha pasado lo mismo, el sindicato y la SEP sólo lo cambian de escuela”.

La SEP no acompaña legalmente a las víctimas ni mucho menos se han ofrecido programas para atención psicológica a las alumnas y los alumnos.

“No puedo garantizar que no sigan ocurriendo”

Sobre el asunto, el secretario de la SEP en Puebla, Luis Maldonado Venegas, se limitó a declarar hace unas semanas que no puede garantizar que no se den agresiones sexuales en las instituciones públicas pero sí que no habrá impunidad. Dijo esto aún cuando la dependencia que dirige no es autoridad ministerial o judicial.

“Yo he sido insistente: yo no puedo garantizar en 12 mil planteles donde concurren cerca de 91 mil maestros y más de un millón casi 800 mil alumnos no sigan ocurriendo actos de agresión, de abuso o de violencia intraescolar, pero lo que sí puedo garantizar es que ninguno de estos actos quede impune y en este caso que se menciona la posición de la Secretaría de Educación ha sido respaldar el curso legal de estos casos, los maestros tienen derecho a oponer su defensa pero la autoridad educativa no va a solapar ninguna situación de este carácter, invariablemente nosotros lo que estamos haciendo es remitirlo a la autoridad competente, en este caso autoridades de carácter ministerial”.

El funcionario no precisó cuál es la forma en que se “respalda el curso legal” de los casos, tampoco se sabe cuántos profesores han sido dados de baja por incurrir en actos delictivos sexuales o bien si existen programas para prevenir las agresiones, ya que actualmente el único requisito para obtener una plaza es el examen de oposición y no se realizan pruebas psicológicas para determinar la personalidad de los profesores que estarán en contacto con los alumnos.

A nivel nacional, negro panorama

De acuerdo con la Primera encuesta nacional de exclusión, intolerancia y violencia en escuelas públicas de Educación Media Superior (2008), de 3 millones 700 mil jóvenes de nivel bachillerato, 6 por ciento dijo haber sido víctima de violación, pero sólo el 8 por ciento denunció ante las autoridades. El 6 por ciento de los hombres y el 2 por ciento de las mujeres que sufrieron abuso sexual atribuyeron la violación a su maestro.

En el primer trimestre de 2008, la SEP reportó en promedio una denuncia de abuso sexual y maltrato cada dos días de clase, de acuerdo con una nota de El Universal.