Nacidas en los 50

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Nacidas en los 50

Por Lado B @ladobemx

25 de agosto, 2023

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Paola Peralta | Girl Up México*

@paoprlt

La violencia de género no desaparece con la edad. Este mes recibimos el día de los abuelos y las abuelas (28 de agosto) y es importante visibilizar los diferentes tipos de discriminación y violencia que viven las mujeres mayores.

Bien sabemos que las desigualdades de género tienen un impacto en el bienestar y salud de las mujeres a lo largo de sus vidas y es que ser “vieja” en una sociedad machista es difícil de comprender para los demás e incluso para las mujeres mismas, ya que el valor social de las mujeres ha estado ligado a su belleza, juventud y capacidad para ser madres y esposas.

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Esto hace, entre otras cosas, que las mujeres mayores estén infrarrepresentadas en el cine, la publicidad y en los productos culturales en general; además, cuando aparecen, lo más común es que salgan como sumisas, descuidadas, sin estudios, dependientes de un hombre, torpes para interpretar temas actuales, conformistas y de nula sexualidad. La mayoría que lea esto pensará en su abuela, familiares cercanos o telenovelas que han normalizado cómo se ven o cómo deberían verse las mujeres de la tercera edad.

Además, encontramos también la versión mala de la mujer mayor encarnada en la imagen de brujas, feas o gruñonas. Así, mientras que los hombres adultos y adultos mayores que aparecen en los medios de comunicación pueden seguir teniendo posiciones de poder y prestigio, parejas más jóvenes y una vida sexual activa, las mujeres mayores se ven limitadas a vidas que siguen estando en función de los otros, a menudo cargadas de connotaciones negativas. Además, las canas, las arrugas y la experiencia son rasgos que pueden ser percibidos como atractivos para los hombres, pero no ocurre lo mismo en las mujeres. Todo esto incide en la forma en la que se trata a las mujeres mayores, pero también en la visión que tienen sobre sí mismas y su identidad.

Lastimosamente, existen muy pocas campañas, fundaciones, proyectos de prevención del maltrato a personas mayores con perspectiva de género. Si bien conocemos ya un poco de estándares normalizados en las mujeres, hablemos ahora de soluciones y aportes que podamos realizar como mujeres de la actualidad para que se rompa el tabú. Primero conozcamos el concepto edadismo y cómo este ayudará a cambiar nuestra perspectiva para iniciar el cambio desde casa.

El edadismo (ageism) es un concepto que fue acuñado por Robert Butler en los años 60 para hacer referencia a la discriminación sistemática hacia las personas mayores por ser viejas. Se basa en una serie de creencias y valores que determinan lo que sentimos y pensamos de las personas mayores y todo esto se refleja en nuestras actitudes discriminatorias que, en la mayoría de las ocasiones, pasan desapercibidas por estar naturalizadas.

Foto: Cado Maestro | pexels.com

Entendemos que es importante fomentar un cambio desde nuestra propia perspectiva para detener la violencia física, psicológica, sexual o económica, detener la normalización de agresiones físicas o verbales hacia mujeres que dependan de hij@s o esposos agresores, desvanecer la creencia en la indisolubilidad del matrimonio y la idea de que todo lo que ocurre en el hogar debe permanecer en el ámbito privado. Todo lo anterior hace que para las mujeres mayores sea más difícil tomar la decisión de separarse o pedir ayuda para salir de una relación violenta. Es importante acercar y normalizar el apoyo psicológico por medio de pláticas, campañas. Si nosotras sabemos de alguien que está pasando por esto, podemos hacerle saber que nunca es tarde para irse, iniciar nuevos proyectos y una nueva vida, que incluso no está mal si siempre le gustó una mujer y no un hombre o si quiere experimentar lo que es la masturbación. Si bien estos son temas que no estamos acostumbrados a escuchar, es lo que debería ser normal.

Por otro lado, requerimos apoyo tanto del gobierno e instituciones de salud para fomentar estas ideas sanas, apoyar el empoderamiento de las mujeres mayores para que estén representadas en todos los niveles de los programas, políticas y servicios, tanto en el diseño como en la implementación y la evaluación, y especialmente en los procesos de toma de decisiones, así como eliminar los límites superiores de edad en la recopilación de datos, especialmente en relación con la salud, incluida la salud sexual y reproductiva, y datos relativos a violencia machista.

Es claro que es un camino difícil, pero con nuestra voz podemos hacer un cambio relevante en todo esto. Si tú tienes una abuela, habla con ella. ¿Qué opina del tema? Empecemos de a poco por darle a conocer el mundo que se merece; el mundo conformista en el que ha estado tal vez pueda desaparecer. Al final, los jóvenes también llegaremos a la vejez, así que es ayuda para ellas y para nosotras quitarnos el edadismo involuntario o tal vez voluntario en nuestra mente y nuestro alrededor para que en un futuro no haya más alas cortadas.

Construyamos una sociedad inclusiva y amigable con las mujeres mayores desde los derechos, la sororidad y el amor.

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