Lado B
Diputaciones plurinominales ¿siguen siendo necesarias?
La opacidad en la selección de candidaturas plurinominales ha provocado que líderes partidistas ocupen curules, o las destinen para sus familiares y aliados políticos; especialistas consideran que se debería reformular la configuración de las cámaras
Por Fernando Merino Noriega @FerMerinoN
30 de mayo, 2021
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El voto tiene dos funciones: abonar a que un candidato o candidata gane alguna diputación, ya sea local o federal, pero también, en ocasiones sin siquiera saberlo, sirve para que otras personas de la misma fuerza política lleguen al poder. Hablamos de las y los diputados plurinominales. 

Estas personas llegan a la Cámara de Diputados o al Congreso local sin necesidad de hacer campaña y con un perfil bajo hasta que toman posesión, para ello ocupan la vía de representación proporcional aprovechando que los criterios de selección de los perfiles son opacos, lo que, de acuerdo con especialistas, provoca que en muchos casos sean  personas cercanas a los partidos quienes se benefician de este mecanismo

Muestra de eso es que 12 de los 13 partidos políticos en Puebla inscribieron en los primeros lugares de las listas de representación proporcional a dirigentes o a sus familiares, por lo que el sistema de representación proporcional genera dudas, particularmente, porque son los partidos quienes eligen a las y los candidatos plurinominales de manera directa y no las y los ciudadanos, es decir, se trata de un sistema cerrado. 

Aunque este mecanismo ha sido criticado por los motivos antes mencionados, Gustavo Montiel, profesor del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (Itesm), dice a LADO B que desaparecer la figura de las diputaciones plurinominales no es una opción, pues se perdería la representatividad de quienes militan en algún partido político que no obtiene la mayoría de votos; una mejor opción sería modificar la forma en la que se configuran los congresos. 

“Si en un distrito [una persona obtiene el] 23 por ciento [de los votos] y [la siguiente obtiene el] 22 por ciento y [la ultima] 21 por ciento, va ganar la que tiene 23 por ciento pero el 77 por ciento de las personas que votaron ese distrito no va a tener representación porque [la persona por la que votaron perdió la elección]”, explica. 

Por su parte, José Antonio Bretón Betanzos, coordinador de posgrados de la Ibero Puebla señala que “las minorías juegan un papel de conciencia frente a las mayorías y eso es de lo que se trata el diseño institucional, por eso el diseño de la cámara de diputados es muy importante”.

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De hecho, México es uno de los pocos países en el mundo con un sistema mixto para la composición de los congresos, es decir, que las y los legisladores se eligen por mayoría relativa y representación proporcional, dice el profesor del Itesm. La diferencia es que en otros países es la ciudadanía la que determina la lista de diputaciones plurinominales y el orden de las y los candidatos.

Cómo se configuran la Cámara de Diputados y el Congreso local 

Foto: Google Maps

En primer lugar es importante entender cómo funciona el sistema de representación proporcional. Esta figura surgió, tras una reforma en 1977, para limitar la aplastante mayoría del PRI, en ese entonces. Desde aquella reforma, la Cámara de Diputados se integra por 500 legisladores: 300 de mayoría relativa (uninominales) y 200 de representación proporcional (plurinominales). 

En el caso de los 200 lugares de representación proporcional, estos son elegidos de cinco circunscripciones (agrupaciones de estados) y cada una tiene 40 lugares que se van llenando con los nombres de las listas que elabora cada partido de acuerdo con los porcentajes de votación obtenidas; una persona tiene más oportunidades de ganar una curul si su nombre se encuentra más arriba en la lista, explica Gustavo Montiel. 

Por ejemplo, si el partido equis obtiene el 10 por ciento de los votos en la circunscripción cuatro (a la que pertenece Puebla), entonces el 10 por ciento de su lista de representación proporcional, es decir cuatro perfiles, entrarán a la Cámara de Diputados. 

Las 300 diputaciones de mayoría relativa representan el 60 por ciento del total de legisladores, pero para reformar la Constitución, o hacer nombramientos importantes, se necesita el voto del 66 por ciento de las y los legisladores, es decir, el seis por ciento restante conformado por las minorías podría permitir o frenar un cambio, explica José Antonio Bretón.

En el caso del Congreso local son 26 los curules que se obtienen por mayoría relativa y los 15 restantes por representación proporcional, dice Bretón Betanzos, pero en este caso la línea es más tenue pues para la mayoría —necesario para hacer cambios importantes— solo se requieren dos legisladores para lograr la mayoría, es decir, 28 votos para hacer alguna reforma importante. 

Falta considerar las coaliciones

Diputaciones plurinominales ¿siguen siendo necesarias?

Foto: Google Maps

Durante sus respectivos periodos, tanto Felipe Calderón Hinojosa (PAN) como Enrique Peña Nieto propusieron reformas para disminuir la participación de partidos minoritarios. Algo similar ocurrió desde Morena, partido con mayoría en la Cámara de diputados, quienes propusieron en 2018 quitar 100 diputaciones plurinominales supuestamente para reducir gastos; sin embargo, su propuesta no fue aprobada.

Para José Antonio Bretón Betanzos, no ha habido modificaciones en el sistema de representación proporcional porque los intentos de reducir las diputaciones plurinominales nunca han sido desde la oposición sino desde el poder, lo cual es una muestra de que este mecanismo es necesario para equilibrar las fuerzas al interior de la Cámara de Diputados o el Congreso.

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Sin embargo, el especialista destaca que sí tendría que contemplarse en las leyes el tema de las coaliciones, pues aunque un partido no pueda tener más de 300 legisladores  —límite establecido en el el artículo 54 de la Constitución—  sumando a sus aliados sí se puede sobrepasar ese límite, como es el caso de Juntos Haremos Historia que con los tres partidos que lo conforman (Morena, PT y Pvem) suman la cantidad de 315 legisladores, lo cual ha provocado que sus  iniciativas, o las del presidente Andrés Manuel López Obrador, sean aprobadas en fast-track.

En tanto, José Antonio Bretón Betanzos agrega que un factor que no permite que exista una verdadera representación proporcional es que las y los diputados pueden cambiar de bancada, lo que coloquialmente se conoce como chapulineo, ya que esto produce una sobrerrepresentación, algo que ya pasa en el Congreso de Puebla. 

Plurinominales en Puebla: un atajo al Congreso

Congreso 1 2

Foto: Marlene Martínez

En Puebla, la representación proporcional se ha convertido en el vehículo para que, una vez concluida su gestión, quienes dirigen los partidos aseguren un lugar en la Cámara de Diputados o el Congreso local.

En cambio, “[las] listas de representación proporcional (…) deberían ser ocupadas por personas que por sus méritos, su compromiso social y por su trayectoria política probablemente (..) que es lo que garantiza la democracia para la sociedad”, dice José Antonio Bretón.  

Ejemplo de eso es el Partido Verde, cuyo dirigente, Jaime Natale Uranga, se puso en primer lugar en la lista de representación proporcional, pero además compite para la diputación por por la vía de mayoría relativa para el distrito XIX (con cabecera en Puebla capital), por lo que si no gana en las urnas es muy probable que sí obtenga un lugar en el Congreso local. 

Algo similar ocurrió en el Partido del Trabajo, con Mariano Hernández Rodríguez; Movimiento Ciudadano, con Fernando Martínez Morales; Partido Encuentro Social (PES), con Francisco Ramos Montaño; y Redes Sociales Progresistas, con Ramón Fernández Solana; en estos casos son todos dirigentes de partidos que no irán a las urnas para obtener un cargo pero es muy probable que lo ganen. 

En el caso del PAN, la dirigente de ese partido, Genoveva Huerta Villegas, obtuvo una candidatura plurinominal para la circunscripción número cuatro (que se conforma por la Ciudad de México, Guerrero, Morelos, Puebla y Tlaxcala) en el lugar número cuatro de la lista. 

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Del lado del PRI, quien encabeza la lista de plurinominales es Jorge Estefan Chidiac, uno de los personajes favoritos del partido por el que se creó la figura de las diputaciones plurinominales. María Isabel Merlo Talavera, secretaria del partido, y Néstor  Camarillo Medina, dirigente de esa fuerza política; están inscritos en el segundo y tercer lugar de la lista respectivamente. Asimismo, la lista del PRD es encabezada por Isaac Martínez Amador, hermano del dirigente de ese partido, Carlos Martínez Amador. 

En cuanto a Morena, el secretario con funciones de dirigente, Edgar Garmendia de los Santos, fue inscrito en el lugar cuatro de la lista de representación proporcional. En el caso de Fuerza Social por México, Víctor Hugo Islas Hernández, tío del dirigente nacional de ese partido (Gerardo Islas Maldonado), encabeza la lista de este partido de nueva creación.

Lo mismo ocurre con los partidos que solo tienen registro local; Emilio Salgado Néstor, dirigente de Nueva Alianza Puebla, fue inscrito en el primer lugar de la lista de diputaciones por representación proporcional; el dirigente del PSI, Carlos Navarro Corro, inscribió a su hermano en el lugar uno de la lista de plurinominales; solo Compromiso por Puebla no inscribió a su dirigente para alguna diputación plurinominal.

*Foto de portada: Creative Commons

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Fernando Merino Noriega
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