26 padres de familia y 17 estudiantes salieron del sur de México, desde Chiapas, pasando por Oaxaca, Puebla, rumbo a Tlaxcala, Morelos, DF y Querétaro, cruzando estados, caminando y alzando la voz con una sola meta: exigir la presentación con vida de los 43 estudiantes de la Normal Rural Isidro Burgos, desaparecidos hace ya casi un año cuatro meses.
La lucha de los padres y madres de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa desaparecidos el 26 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero, está lejos de terminar. A casi 16 meses de los hechos, en los cuales fueron asesinados otros estudiantes y jugadores de futbol, la “verdad histórica” se aleja mucho de la versión del Grupo Internacional de Expertos Independientes (Giei), conformado para investigar lo que pasó realmente durante la llamada “noche de Iguala”.
Felipe de la Cruz, padre de uno de los normalistas desaparecidos, dijo que el grupo de padres convoca al 5 de febrero al Primer encuentro nacional por la indignación, integrado por varios movimientos que se han unido desde la desaparición de los 43. En rueda de prensa a las tres de la tarde en el Parque Juárez, punto donde se citó a la concentración antes de salir a la marcha rumbo al zócalo, Felipe de la Cruz dijo que en el estado de Puebla también hay represión, y por eso la caravana sur de Ayotzinapa pasó por la entidad.
Alrededor de 300 personas entre padres, normalistas, estudiantes de la Normal Rural de Teteles, en la Sierra Norte de Puebla, ex presos políticos, integrantes de la Unión Popular de Vendedores Ambulantes 28 de octubre (Upva) y maestros marcharon del Parque Juárez al zócalo de Puebla, todos abanderando la lucha de Ayotzinapa.
A la par, otros padres de familia y normalistas están recorriendo estados del norte de la República en la caravana al sur, cobijando otras luchas y con la misma exigencia de verdad y justicia.
EL PEPO