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Lado B

La carencia de permisos y estudios para las obras del Teleférico –como lo ha reconocido el propio INAH a nivel nacional– y los Fuertes de Loreto y Guadalupe con la construcción del Viaducto Zaragoza, así como las restricciones al libre acceso – oficio número 401-A-311-(724-7)-01-0301- de los investigadores del INAH que busquen hacer trabajos de campo en las zonas de monumentos del estado, serán algunas acciones con las que se recordará a José Miguel Rivas García, quien este martes fue destituido como  delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Puebla.

A raíz de su designación como titular de este organismo en junio de 2012, por el también recientemente destituido director nacional del INAH, Alfonso de María y Campos; Rivas García dejó el cargo bajo los constantes señalamientos de los trabajadores del propio INAH-Puebla, quienes habían pedido en distintos escritos su destitución, ya que aseguraban que no contaba con el perfil para ocupar el cargo por contar con una formación de actuario y haber tenido puestos en áreas administrativas.

En el lugar de Rivas García, quedó José Francisco Ortiz Pedraza, especialista en antropología física, y quien fue delegado del INAH durante el sexenio de Melquiades Morales Flores.

Hasta el momento no se ha dado a conocer las razones por las cuáles fue destituido de su cargo José Francisco Miguel Rivas García, sin embargo el último hecho que llamó la atención de los medios locales y nacionales fue la obra del Teleférico, ya que con la destrucción de la Casona del Torno, la obra se encuentra en litigio, pues aún está por celebrarse la audiencia constitucional por el amparo que se ventila en el Juzgado Cuarto de Distrito, interpuesto por el Comité Defensor del Patrimonio Histórico, Cultural y Ambiental de Puebla y la Fundación Manuel Toussaint.

Con información de Proceso.