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Lado B

Este domingo se vivió el cuarto día consecutivo de violencia en Egipto, luego que la semana pasada se suscitaran enfrentamientos entre inchas de los equipos Al-Masry y  Al-Ahly en el Estadio Port Saíd, que dejaron como resultado 79 muertos y más de mil heridos.

El centro de El Cairo volvió a convertirse en zona de guerra, ya que cientos de manifestantes se enfrentaron a las fuerzas de seguridad. Las versiones apuntan a dos grupos responsables del regreso de la violencia en Egipto:  los Hermanos Musulmanes y los seguidores del antiguo régimen de Hosni Mubarak.

Hasta el momento se estima que el número de muertos en esta cuarta jornada de violencia es de 9, así como cientos de personas han resultado heridas. Los enfrentamientos se concentran en los alrededores del Ministerio del Interior, la sede de la Fiscalía General y el edificio de la televisión estatal.

Con gases lacrimógenos y balas de goma la policía egipcia ha intentado disuadir a los manifestantes; sin embargo, sus intentos hasta el momento han fracasado.  Y es que el incidente –en el Estadio Port Saíd- desató la ira del pueblo egipcio contra el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas  y la policía, a quienes acusan de no haber realizado acciones contra los responsables de estos asesinatos.