• Los diputados ni siquiera le entraron a fondo al asunto, ya sea para regularlo o prohibirlo, critica

Foto: Mely Arellano.

Joseline Santos Enríquez

Para el ex diputado local, José Manuel Benigno Pérez Vega, el retiro de mototaxis propuesto por el Congreso local y que inició hace un par de semanas no solucionará el conflicto de transporte público que existe en 42 municipios de la entidad.

A su consideración, las pequeñas unidades son necesarias pues tienen la función de alimentar a las rutas establecidas en lugares dónde no llegan, tal es el caso de colonias o juntas auxiliares, por ende descartó que los mototaxis sean competencia desleal de concesionarios.

Foto: Joel Merino.

El ex legislador, también conocido como Pepe Momoxpan, criticó a los integrantes de la actual Legislatura por enviar un exhorto a las autoridades estatales y municipales para retirar las más de 3 mil 500 unidades que operan en el estado, sobre todo cuando pudieron analizar y discutir el conflicto a fondo, ya sea para prohibirlo o reglamentarlo.

Recordó que de existir voluntad, el Legislativo habría rescatado la iniciativa que presentó mientras fungió como diputado en la que propuso modificar la Ley de Transporte para el Estado de Puebla a fin de que la figura de mototaxis se incluyera en los artículos 75 fracción II , 77, 79 en su segundo párrafo, 91, 98, 116 y 117 de la citada ley.

Entre los argumentos para enviar la petición de retiro, el Congreso local destacó que el “análisis técnico, operativo, económico, ambiental, comparativo y lega”, entregado por la Secretaría de Transportes refiere que las unidades son inseguras para los usuarios, aunando a que se catalogan como “peligrosas y contaminantes”.

El ex diputado refutó la justificación y la calificó como falaz. Puntualizó que cualquier medio de transporte –automóviles, motocicletas, autobuses, aviones- es inseguro si se conduce de manera irresponsable, sin precaución y violando las especificaciones propias de cada unidad.

Puntualizó que a la fecha no se han reportado decesos provocados por atropellamiento o accidentes viales, a diferencia del transporte público dónde las cifras aumentan año con año.

“Las unidades no son inseguras por el tamaño, es como si dices que un auto compacto es más peligroso que un auto grande, es una tontería. La verdad es que no los quieren porque hay un conflicto de intereses con transportistas, son puras palabras de aquí o allá (…) tampoco los quieren porque se ven mal y no quieren que México sea como Tailandia o la India, pero somos un país en vías de desarrollo con ellos y eso no se puede evitar”.