Lado B
Investigadores BUAP crean tratamiento para proteger a las abejas de plagas
México es uno de los principales productores de miel en el mundo, y pese a ello la vida de las abejas, gracias a las cuales existen la mayor parte de las frutas y verduras que consume el ser humano, no está garantizada; la BUAP campus Tecamachalco trabaja desde hace años en su preservación
Por Aranzazú Ayala Martínez @aranhera
14 de octubre, 2021
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Si te paras en un puesto de frutas en el mercado te darás cuenta que el 80 por ciento de todo lo que hay allí depende de la polinización de las abejas, pues ese porcentaje de lo que comemos “es polinizado por ellas”. Sin embargo, estos insectos deben enfrentarse a múltiples dificultades para subsistir, entre ellas las prácticas agrícolas y algunas enfermedades.

Martes

Así lo explica el Doctor Fernando Utreras de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ) de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), donde desde hace al menos una década se trabaja en la preservación de las abejas mediante el mejoramiento genético.

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La principal línea de trabajo en la universidad es la tolerancia de las abejas a enfermedades —como el piojo varroa destructor— para que las colmenas no se contaminen ni mueran.

De acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, la varroasis (producida por el varroa) es la principal amenaza de las abejas en todo el mundo. Al respecto, el Doctor Utrera explicó que el tratamiento tradicional contra esta enfermedad contamina la miel y finalmente daña a quienes la consumen, pero si las colmenas no los reciben pueden desaparecer en dos o tres años.

“Tú estás dando un tratamiento, pero estás vendiendo un producto contaminado y eso a la larga puede ocasionar un daño para la salud”, dijo. Así que el investigador y su equipo trabajaron en otra opción: un tratamiento por selección artificial, principalmente contra el varroa destructor, que ha tenido ya buenos resultados.

Desde el año pasado han logrado sanar a varias abejas reinas, mismas que después se entregan a apicultores. Para el ciclo de producción en abril de 2022, se espera que el equipo pueda producir ya abejas reinas sanas a gran escala, al menos 200 en todo el estado de Puebla, cuyas crías (en promedio producen entre 2 mil 500 y 3 mil huevecillos diarios) puedan ser ya resistentes a esta plaga.

“Lo único que nosotros pedimos cuando las regalamos es que cuando esa reina ya esté en su máximo pico de postura (su periodo más fértil) nos permitan ir a hacer observaciones a la colmena para ver si está respondiendo”, dijo.

El cuidado de las abejas

Foto: Dr. Fernando Utrera

En general, Puebla es una importante productora de miel y conservadora de abejas, principalmente de las abejas meliponas en la Sierra Norte de Puebla, donde se produce esta miel que tiene mayores propiedades medicinales y proteínas que la miel tradicional, por eso es más cara.

Las meliponas son abejas sin aguijón, también conocidas como “abejas sagradas mayas”, por la gran importancia que tenían para la población maya en la época prehispánica. El investigador explicó que, en general, sí hay conservación de abejas en la entidad, principalmente de las meliponas, pero aún es necesario proteger más a estos insectos.

Por eso, otro de los proyectos que tienen en la Facultad de Medicina Veterinaria de la BUAP es la certificación de un laboratorio para hacer análisis de calidad de las mieles, y así poder consolidar la producción de reinas sanas que protejan las colmenas.

Otras formas de conservación

Foto: Dr. Fernando Utrera

La existencia de las abejas también peligra por la extensión de monocultivos, es decir, extensiones de tierra donde se cultiva una o pocas cosas, ya sea de consumo humano o para la práctica ganadera.

En entrevista para LADO B, el Doctor Utrera mencionó el ejemplo de la desaparición de nichos ecológicos por el cultivo de caña de azúcar en toda la zona limítrofe entre Puebla y Veracruz, y la región aledaña a Orizaba. Además, para esta actividad se usan pesticidas que son dañinos para las abejas, junto con la deforestación.

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Eso significa que ya no hay tanta floración y entonces no hay tanto polen, que es la fuente de proteína de las abejas, y sin él no se puede llevar proteína a la colmena, por lo que la reina no puede ovopositar (esto es, poner los huevos para el nacimiento de crías); entonces la población de abejas disminuye paulatinamente hasta desaparecer.

Por ello, el Doctor Utrera recomienda no usar pesticidas tóxicos para proteger a las abejas y, finalmente, a toda la cadena de alimentación.

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*Foto de portada: Dr. Fernando Utrera

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Autor Lado B
Aranzazú Ayala Martínez
Periodista en constante formación. Reportera de día, raver de noche. Segundo lugar en categoría Crónica. Premio Cuauhtémoc Moctezuma al Periodismo Puebla 2014. Tercer lugar en el concurso “Género y Justicia” de SCJN, ONU Mujeres y Periodistas de a Pie. Octubre 2014. Segundo lugar Premio Rostros de la Discriminación categoría multimedia 2017. Premio Gabo 2019 por “México, el país de las 2 mil fosas”, con Quinto Elemento Lab. Becaria ICFJ programa de entrenamiento digital 2019. Colaboradora de “A dónde van los desaparecidos”
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