Hablaré en esta ocasión sobre el más reciente comunicado de una de las facciones en conflicto, los académicos e investigadores agrupados en la Red ProCienciaMx. Trataré de ser imparcial; apoyo a la ciencia mexicana, solo quiero que esta sea tan transparente como cualquier instituto que maneje dinero público y que hable con precisión de lo que está haciendo. La Red ProCienciaMx tiene en sus filas a científicos que respeto y admiro, pero también me queda claro que si bien son una muestra de la comunidad científica mexicana, no necesariamente representan los intereses de todos los investigadores que hay: ni son todos los que están ni están todos los que son.

En el comunicado en cuestión, la Red ProCienciaMx insiste que los cambios en los criterios de selección favorecen a los científicos que sigan los lineamientos de la nueva política científica del gobierno, esto en detrimento de otro sector de investigadores. Según la versión en la Red ProCienciaMX, solo aquellos científicos cuyas líneas de investigación giran alrededor de la salud, agua, educación, soberanía alimentaria, agentes tóxicos y procesos contaminantes, energía y cambio climático, sistemas socioecológicos, vivienda, cultura y  seguridad humana tendrán preferencia sobre aquellos que tengan intereses diferentes. En este sentido se alega que esta preferencia “afecta el derecho a la libertad de cátedra”, esto es que no permite al científico escoger la línea de investigación que más le interese. Sin embargo hasta aquí no se ha prohibido nada, se infiere que habrá una tendencia, como ya lo ha dicho el Conacyt, pero ¿por qué está mal dirigir la búsqueda de soluciones hacia temas específicos identificados como críticos? ¿Por qué esto habría de vulnerar un derecho? Hay dinero asignado, pero en realidad no todos podrán tener acceso al mismo, así que ¿por qué no darle prioridad a algunos temas que se justifiquen? No se cuestiona la libertad de cátedra, es que no hay suficiente presupuesto para satisfacer todas las demandas.