Casaui, forma coloquial de referirse a la gente de Casablanca, significa, para mí, la diversidad de influencias que se encuentran por aquí en la arquitectura, en el arte y en la vida diaria. Aunque la relación de los marroquíes y de los musulmanes en general con la música es algo que sigo sin entender (¿escucharla nos acerca o nos aleja de Alá?), es cierto que aquí he conocido nuevos grupos, instrumentos y géneros del llamado mundo arabo-musulmán, pero también de otras latitudes.
Hela aquí entonces, una lista que seguirá creciendo y que representa un poco de esa variedad y riqueza: jazz, rock y metal, sonidos tradicionales, pop y rap; grupos marroquíes, pero también españoles y nórdicos, en árabe, inglés y español, por qué no.