Foto tomada de El Universal

Aranzazú Ayala Martínez

@aranhera

Con el reciente conflicto que enfrenta la empresa Volkswagen y sus marcas aliadas luego de que se conociera que a través de un software fraudulente para reducir los índices de contaminantes, y la polémica que se desató a nivel mundial, la economía poblana también se tambalea, pues cerca del 10 por ciento del Producto Interno Bruto es producido por la industria automotriz en el estado, aunque el encadenamiento del sector productivo eleva la dependencia de la economía poblana de la suerte de la armadora germana.

El 18 de septiembre se destapó el escándalo mundial cuando se supo que VW mintió sobre las pruebas de emisión de sus vehículos de motores diesel: la automotriz manipuló los resultados de las emisiones de alrededor de 11 millones de vehículos para que pareciera que contaminaban menos. De los autos alterados, aproximadamente 32 mil circulan en México, y la empresa alemana podría tener que pagar 118 millones de pesos de multa en el país por haber alterado los resultados y defraudado a los consumidores, advirtió la titular de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Lorena Martínez Rodríguez.

Aunque todavía no se puede estimar el alcance del problema que enfrenta la armadora alemana, el coordinador de la licenciatura en Ciencia Política de la Universidad Iberoamericana Puebla, Miguel Calderón Chelius, dijo que hay dos posibles escenarios.

Uno positivo, donde se logre contener el problema mediante una campaña de control de daños de la imagen y su efecto sobre la producción de automóviles sea relativamente menor. Entonces lo que podría pasar en la planta de VW sería que hubiera sólo una disminución relativa de la producción, paros programados y a partir de ahí una caída y rápida recuperación, afectando en el ingreso a los trabajadores sólo temporalmente.

Y el negativo, en el que el prestigio de la marca a nivel mundial tenga un fuerte impacto y lo que puede traer aparejado una caída en la venta de automóviles mucho mayor, lo que puede provocar recortes muy importantes en la producción.

La principal desventaja según el académico de la Ibero es que la VW trae emparejadas muchas industrias, otras plantas que le hacen piezas y materiales.

“Hay una serie de encadenamientos productivos que hacen que los efectos económicos se multipliquen. No solamente son los empleos en VW, son en todas las compañías y empresas que son proveedoras en VW, de telas, plásticos, molduras, tornillos, pinturas, de todos estos productos que demanda la producción de automóviles, incluso los que son importados y los que se producen directamente en los corredores industriales de Puebla y Tlaxcala. Sería muy grave en términos de economía de la región”, dijo.

Y el efecto dominó de mucho mayor alcance se podría ver reflejado también en otros sectores ajenos a la industria automotriz.

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Calderón explicó que si se reduce la producción entonces los trabajadores tanto de la VW tendran menores ingresos y a consumir menos. Y el efecto vendrá en cascada, afectarán a otros negocios como restaurantes, tiendas y cines, que a su vez tendrán que hacer ajustes por la disminución de sus ingresos. Ese sería, de acuerdo al académico, el escenario más grave.

También el Consejo Coordinador Empresarial poblano ya se pronunció ante la repentina crisis. Su presidente Fernando Treviño Núñez dijo en entrevista con el diario El Financiero que todas las empresas de la entidad deberían tomar medidas de control de gastos y de ahorro, y que esto pone en un alto riesgo la economía de Puebla.

Calderón Chelius dijo que el principal problema es que la economía poblana depende de una sola industria, lo cual es muy peligroso. A decir de la consultora Aregional la producción automotriz representa para el estado el 8.7 por ciento del PIB, sin contar con las economías enlazadas al sector.

Sugirió que el gobierno debería tomar medidas a largo plazo para diversificar las actividades productivas en la entidad, porque el efecto de lo que pase en la planta de VW se sentirá paulatinamente en toda la entidad.

Y aunque el gobernador Rafael Moreno Valle anunció la compra de 200 vehículos, en palabras de Calderón esta no es una medida que pueda compensar el efecto que pueda tener la disminución de ventas de vehículos en Estados Unidos, donde se habla de un mercado de decenas de miles.

En primera instancia la crisis impactará en los corredores industriales de Puebla y Tlaxcala, pero poco a poco el impacto de la disminución de ingresos se va a volver un encadenamiento incluso a nivel regional.

Sin embargo, a nivel federal, dijo Calderón, el efecto podría no sentirse pues otras plantas automotrices, como la de Ford, podrían aumentar su producción y compensar la caída en VW.

Planta de Audi, también en peligro

Calderón dijo que si el problema se agudiza y las ventas en el mercado automotriz estadounidense, el principal comprador de autos, caen drásticamente, podría poner en riesgo a corto plazo los planes de la planta de Audi en Puebla.

Foto: William Westwilliam West | AFP | Getty Images Tomada de telegraph.co.uk

Uno de los modelos de Audi también está involucrado en el escándalo de alteración del software de los vehículos, así que también sus ventas podrían bajar en el mercado estadounidense.

“Yo creo que todavía no llegamos al punto de que la planta de Audi no sea necesaria, pero evidentemente puede ser que se retrase la apertura, que hable de una menor necesidad. Todavía no está clara la magnitud porque el fenómeno sigue creciendo”, dijo Calderón.

El impacto de lo que pasó a nivel mundial con la planta genera posibilidades que han preocupado en todos los niveles.

“Simplemente la posibilidad del efecto que puede tener sobre los planes de expansión de Audi ya genera una preocupación social y política en todos los agentes en Puebla.”

En su opinión, los efectos concretos del alcance del escándalo de la armadora alemana se pondrán notar concretamente en el último trimestre del año, cuando refleje el evento en la venta de los vehículos.

Aunque VW dijo que recogerá los automóviles señalados con el fraude del software, Calderón dijo que todavía falta ver cómo se comportan las ventas de los otros modelos que podrían quizás disminuir el efecto negativo.

Hasta el momento la única medida que ha tomado la planta es suspender las jornadas laborales sabatinas, a partir de este 2 de octubre, y rechazó que vaya a haber recortes en la plantilla laboral.