Josué Cantorán

@josuedcv

Con un foro donde se presentarán siete propuestas musicales originarias de Puebla, el fanzine El Contenedor celebrará este sábado los tres primeros años de su historia, en los que ha editado 12 números, dando apertura a la publicación de escritores y artistas gráficos jóvenes y reinstalando el interés por el movimiento de las publicaciones experimentales a nivel local.

En “Las flores del mal”, como se ha llamado a este concierto, se presentarán los grupos poblanos Luminosa, Perro Muerto, Iván García y Los Yonkis, King Nini, La Trola, Exterminador de DJs y Los Planetas Muertos, así como el argentino El Barba Dub, lo que conforma una selección ecléctica de propuestas diversas organizada por Producciones Nini.

Además de lo musical, en el evento, cuya cuota de cooperación será de 40 pesos, se ofrecerá la degustación gastronómica de Linaje Mexicano, se reglarán 50 serigrafías realizadas por Vecco Gallo e impresas por Bliss y se proyectará el trabajo de los videoastas Don Anahí y Mariano Orell, todo en las instalaciones de La Emisora Gourmet (5 Oriente 5 San Andrés Cholula).

Tres años de El Contenedor

Todo esto se llevará a cabo para celebrar los primeros tres años del fanzine El Contenedor, cuyo primer número fue publicado en abril de 2012.

Con una historia de nueve números sucesivos, más un número cero y dos publicaciones especiales no numeradas, El Contenedor surgió como el esfuerzo de un grupo de jóvenes recién egresados de distintas carreras que buscaron crear una plataforma para mostrar sus primeros trabajos, ante la dificultad de ingresar al circuito institucional del arte local.

Después de la publicación del primer número, los integrantes del colectivo se dieron cuenta de las ventajas que ofrece un formato de publicación como el fanzine, que no sólo es de bajo costo de producción sino que permite a los creadores un espacio de autonomía suficiente.

–Era una plataforma –explica Gabriela González, una de las integrantes del fanzine, a Lado B– donde todos podían hacer algo de lo que habían estudiado y al mismo tiempo podían difundir su trabajo.

La calidad del formato de El Contenedor los ha llevado a realizar alianzas y colaboraciones con otros artistas y fanzineros de otras partes del país, como el Distrito Federal, Chiapas y Guadalajara, e incluso de otras sedes de América Latina, en especial Quito, Ecuador.

Integrado por la historiadora Yuraí González y los artistas Aro Varse, Albano Edro, Gabriela “Malhechx” y Vecco Gallo, la idea de El Contenedor es dedicar cada número a un tema y convocar a artistas gráficos o literarios a producir obra expresamente sobre dicho tema para el fanzine.

Algunos de los temas abordados en números anteriores por este proyecto son el cuerpo, la comida, el descubrimiento, la ciudad, y se realizó una edición enfocada al texto donde se publicaron textos cortos y sólo se incluyó una ilustración.

En cuanto a los artistas que han colaborado en este proyecto, se podrían mencionar los nombres de Kimil Balam, Santa Grifa, Cristóbal Sarro, Rapiña y Ediciones Betamax.

Los formatos de edición es otro de los puntos con los que El Contenedor gusta de experimentar, pues si bien algunos de sus número han sido realizados en el formato clásico del fanzine (hojas tamaño carta dobladas a la mitad), otros han sido realizados de distinta manera, jugando con las posibilidades que la obra a publicar puede ofrecer.

Más recientemente, como parte del Programa de Desarrollo Cultural para Jóvenes, de Conaculta, los integrantes de El Contenedor han logrado realizar distribuciones gratuitas de sus productos editoriales e incluso han impartido talleres para niños y adolescentes en los que se dan las herramientas para producir sus propios fanzines.

El número 10 estará dedicado a Ricardo Cadena

Debido a que en las primeras versiones sobre el asesinato del joven Ricardo Cadena, muerto a manos de un policía municipal en San Pedro Cholula, aseguraban que éste se encontraba realizando un grafiti con gis, el número 10 de El Contenedor estará dedicado a él.

Si bien la versión sobre la pinta fue descartada posteriormente por la Procuraduría General de Justicia del estado, algunos artistas consideran que la penalización del graffiti forma parte de un proceso de criminalización a distintos sectores de la juventud que no se apegan del todo a estándares convencionales.

–Cuando se hizo la primera junta –dice Gabriela– con algunos artistas se pensó que era importante sacarlo porque no es sólo criminalizar el graffiti sino la juventud entera, forma parte de los sectores que se criminalizan.

De modo que el número 10 de esta publicación tendrá varias versiones. Además de la versión digital descargable, se imprimirán algunos números con la finalidad de distribuirlos en tiendas de graffiti y puntos clave donde jóvenes dedicados al arte urbano puedan adquirirlos.

Con colaboraciones gráficas y escritas, así como un instructivo donde se explicará lo que los jóvenes deberían hacer en caso de encontrarse en una situación de abuso policial, se hará otra versión que se pegará en las paredes de la ciudad.

Este número estará disponible la primera semana de junio.