Josué Cantorán

@josuedcv

Junto con otros cuatro hombres, el artista de origen argentino Enrique Jezik levanta varias placas de acero y concreto mientras una excavadora les va trazando rasgaduras de arriba a abajo, varias veces. El poder imponente de los movimientos de la máquina contrasta con el esfuerzo de los hombres, que gimen mientras usan todas sus fuerzas para mantener la placa en posición vertical.

Grabado en un video de 14 minutos, esa acción representa, en el lenguaje de los artistas contemporáneos, “la resistencia de la sociedad al poder excesivo”. Es un videoperformance titulado “Aguante”, ganador en 2013 del premio ArteBA-Petrobras, considerado uno de los más importantes del arte conceptual.

Este 22 de octubre Enrique Jezik estará en Puebla en las instalaciones del Colectivo La 15 (15 Norte #1011) como parte del proyecto La Pajarera, para proyectar su video y después comentarlo con estudiantes de arte de las diversas universidades que ofrecen dicha carrera en Puebla, así como el público general que quiera conocer más de cerca los procesos que convergen en torno a la creación del arte contemporáneo.

La Pajarera, un proyecto que inició hace casi tres años, nació ante la necesidad de que los estudiantes de artes visuales de la ciudad se adentraran al proceso de los artistas actuales, algo de lo que generalmente carecían en sus programas de estudios. Desde entonces se han organizado foros con creadores como Marcela Armas, entre otros.

–La idea es que los chavos tuvieran un acercamiento con estos artistas –explica en entrevista Santos Cuatecontzi, del Colectivo La 15–, con una relación mucho más cercana que con artistas con más trayectoria que no tienen conciencia de los problemas que los estudiantes afrontan (…) La Pajarera surge como una cátedra alterna, paralela a las carreras de arte de la ciudad.

En esta ocasión el objetivo es que los estudiantes puedan charlar con Jezik, después de ver su video, sobre el proceso de investigación y reflexión que lo llevó a crear la pieza, y así puedan hablar sobre los temas que el arista ha explorado a lo largo de su carrera, como la resistencia al poder, el enfrentamiento al sistema y la colectividad que se aglutina para hacerle frente.

Otra de las piezas más conocidas de Enrique Jezik es “Ejercicio de percusión”, un performance que consistió en que elementos de la fuerza pública del Distrito Federal ingresaron a las instalaciones de Ex Teresa Arte Actual, donde se llevó a cabo el evento, haciendo ruido con sus botas y escudos. Los asistentes, al escuchar su presencia, comenzaron a inquietarse y asustarse, sin saber que justamente ésa era el performance.

Aunque la relación entre Jezik y La Pajarera se dio desde el inicio de este proyecto, en estos momentos históricos donde la violencia y los procesos de resistencia al poder ocupan un lugar importante en México, el trabajo de este artista, considera Santos, se vuelve aún más importante.

–Nosotros lo que vimos era la pertinencia del proyecto cuando hay necesidad en las escuelas y la perspectiva de los alumnos de ver algo que se está generando en este momento y que en la currícula de la escuela no sucede, no se marca.

Otro de los objetivos de este proyecto es descentralizar la escena del arte contemporáneo en México: que los jóvenes puedan tener acceso a creaciones artísticas que generalmente sólo pueden verse en el Distrito Federal, y que también los artistas radicados en la capital conozcan los espacios y a los artistas jóvenes de otras ciudades.

Para Santos Cuatecontzi lo importante es fortalecer la escena del arte contemporáneo local, un movimiento que ha tenido altibajos desde que en 2006 gozó de su mejor momento, en el que, considera, “gozaba de cabal salud”, pero que después vio desaparecer espacios tanto independientes como institucionales (como la galería de arte contemporáneo “Ángeles Espinosa Yglesias”, donde ahora se ubican oficinas de cobro de control vehicular).

Porque es en la búsqueda de esos espacios, dice Santos, donde el arte pierde. Mientras el artista busca dónde exponer pierde tiempo para producir.

–No dan chance a la producción continua de obra, hay una pelea entre la producción y luego buscar dónde se exhibe y cómo acercar la obra a la gente, muchos artistas se han vuelto gestores.