Foto: Wachangel

Ambar Barrera

@Dra_Caos

En agosto del año pasado el colectivo de “Bordando por la paz y la memoria: una víctima, un pañuelo” comenzó a reunirse en diferentes espacios públicos para bordar en pañuelos blancos los nombres de las personas asesinadas y desaparecidas a causa de la ola de violencia en el país. 

“Creemos que los muertos son de todos, por eso empezamos a bordar los casos” dice Rosa Borrás, haciendo un recuento de las acciones del colectivo que nació replicando el proyecto de Bordados por la Paz que surgió en el Distrito Federal en 2011. “El objetivo inicial era construir un memorial efímero ciudadano por las víctimas de la guerra contra el narco que desató el gobierno de Felipe Calderón. Este memorial se llevó a cabo el 1ro de diciembre en el DF como despedida a Calderón y bienvenida a Peña Nieto para recalcar que no olvidamos y que no vamos a dejar que la violencia siga escalando”.

Foto: Mayra Guarneros

Además del memorial, el colectivo ha realizado bordadas especiales con otros grupos de activistas. Participaron en el Encuentro de Escritores por Ciudad Juárez, en la jornada de 10 días por la Paz y los Derechos Humanos y en la Campaña Universitaria por la Paz, la Justicia y la Seguridad Ciudadana de la Universidad Iberoamericana. También realizaron bordadas especiales para dejar constancia de los crímenes de odio por homofobia, feminicidios y otra por los niños fallecidos en la guardería ABC.

La finalidad de bordar estos casos es dar nombre a las víctimas, solidarizarse simbólicamente con las familias y realizar una manifestación pacífica en contra de la violencia en el país haciendo memoria; no permitiendo que esas muertes sean olvidadas. Con estas acciones, Bordando por la Paz no solo ha logrado visibilizar los casos de violencia sino también reconstruir un tejido social que se tenía olvidado; tomar las plaza públicas.

Foto: @CoFemPue

“Peña Nieto llegó a su 1er Informe de Gobierno con la cifra de 1375 ejecuciones, lo cual dice que la situación de violencia no ha cambiado en nada. Al contrario, se está normalizando y se está omitiendo. Por eso seguimos bordando. Estas muertes no se olvidan y todavía se exige justicia” declara Eduardo García,  integrante del Colectivo Bordando por la Paz.

Y señala: «La cifras se han maquillado. Muy pocas personas saben que en Puebla de enero a febrero de este año ha habido 8 desapariciones forzadas y semanalmente se registran de 1 a 5 homicidios».

El colectivo reafirma su invitación a la ciudadanía para reunirse y bordar por la paz, esta ocasión también con motivo de su aniversario, el 29 de septiembre a las doce del día en la Plaza de la Democracia, con la idea de que “solo se puede tener paz a través de la justicia”.