• Tras los hechos del pasado sábado 1 de diciembre, 69 detenidos esperan la sentencia de las autoridades

• Familiares de los detenidos hacen un llamado a que se compruebe la participación en los disturbios

Imagen: Facebook

Xavier Rosas

@wachangel

“Claudia realmente no es violenta, digamos que no cubre el perfil de lo que están achacando ahora, de las personas que están presas”, asegura su hermana.

Claudia Ivette Trejo Gómez es egresada de la Facultad de Ingeniería y docente adjunta en la Facultad de Economía de la UNAM. Los fines de semana acostumbra  andar en bicicleta en el Distrito Federal, e incluso forma parte de un grupo llamado “Bicitekas”. Ella, al igual que otras 11 mujeres, ahora se encuentra en el Penal de Santa Martha, a la espera que se resuelva su situación jurídica. Ella, al igual que a los otros 68 detenidos el 1 de diciembre, la incrimina las acusaciones de cuatro policías.

De acuerdo con el activista y abogado Jesús Robles Maloof son sólo cuatro los policías que en ese mar de rostros, confusión y caos que se vivió en el DF el pasado sábado en varios puntos de la ciudad pudieron identificar a 69 responsables de los actos vandálicos.

En un artículo publicado en el portal Sin Embargo, titulado ¿Están detenidos los VERDADEROS causantes del vandalismo del 1 de diciembre? Parece que NO”, el también colaborador de Propuesta Cívica, da a conocer que la acusación es sólo una para los 69 consignados, en ese único texto cuatro policias vieron a los consignados «a 12:45 horas del sábado se enfrentaron a un policía que patrullaba Balderas esquina avenida Juárez y durante los hechos vandalizaron la unidad TI09 al grado inhabilitarla. (…) A las 13:30 horas, los mismos  “vándalos” se enfrentan a un mujer policía en Eje 1 Norte y república de Brasil. Es decir en La Lagunilla, distante del primero punto por 3 kilómetros».

En su artículo Robles Maloof destaca que “en tantos años de ejercicio profesional, no había conocido una narrativa justificadora tan incongruente”.

“Nosotros vivimos por el metro Hidalgo –explica a Lado B Jessica Trejo, hermana de Claudia–, y ella acostumbra ir a las librerías y se va caminando. Me parece que en ese momento se integró a la manifestación”.

Claudia fue detenida el sábado 1 de diciembre en Filomeno Mata y 5 de Mayo, uno de los puntos en donde las detenciones presentan irregularidades, de acuerdo con el defensor de derechos humanos, Jesús Robles Maloof.

– ¿Claudia es militante de alguna organización?

– No, para nada. Ella había ido a algunas manifestaciones pero como sociedad civil, por su cuenta -responde su hermana.

Jessica cuenta que fue gracias a un compañero de Bicitekas que se enteró que su hermana había sido detenida: “este chavo andaba por ahí y empezó a ver cómo arrestaban a la gente. Él saco su teléfono y estaba tomando fotos; dice que vio que estaban subiendo a unos chicos a un camión, que siguió al camión, y cuando los bajaron se dio cuenta que uno de ellos era mi hermana”.

Y agrega: “dice que ella lo reconoció y le dio rápido una cangurera que llevaba puesta. No sé si se la aventó, porque obviamente no lo dejaban acercarse los granaderos y él fue el que nos avisó ‘estamos tres o cuatro padres aquí enfrente del ministerio’, eso me dijo”.

Foto: @earoche

Alrededor de las 15:30 horas, Jessica Trejo llegó al Ministerio Público 50 donde se encontraba su hermana detenida, al igual que otras 69 personas: “Ella no usa celular, entonces cuando la detienen, no tuvo manera de comunicarse. Al llegar no nos dejaron pasar a preguntar, de hecho a las afueras había granaderos cercando todo el perímetro, no dejaban pasar a ver los detenidos. Ni a abogados, ni a familiares, a nadie dejaban pasar al MP. Solamente, como después de una hora o más, llegó una chava de Derechos Humanos, y a ella fue la única que dejaron pasar. La verdad los Derechos Humanos del MP fueron una farsa, hubo demasiados atropellos con los detenidos; incluso a los familiares que estábamos afuera del MP nos cercaron los granaderos”.

A partir de ese momento la familia de Claudia Ivette Trejo no ha podido comunicarse con ella. La poca información que les proporcionaron las autoridades, así como el cerco de los granaderos a las afueras del Ministerio Público 50, impidieron cualquier comunicación con los detenidos: “el MP nos negó cualquier tipo de derecho, o sea, siempre hubo un cerco hasta que los consignaron, y cuando los consignaron, por supuesto que no avisaron ni a abogados ni a familiares”, señala.

Y agrega: “de hecho mintieron porque habían dicho que más tarde íbamos a poder saber ‘qué onda’, y cuál, regresamos como a las 7:30 de la mañana –del domingo 2 de diciembre- , y vimos a unos chicos que soltaron. Nos dijeron conforme iban saliendo ‘ya no hay nadie. Nos quedamos unos cuantos aquí, a los demás ya se los llevaron’”.

Fue en aquel momento que Jessica logró ingresar al Ministerio Público 50, trataba de conocer si las versiones eran ciertas, si su hermana ya no estaba ahí: “a las chicas que salieron muy alteradas, les pregunté si habían estado en contacto con Claudia, y me dijeron ‘sí, creo que sí. Me dijeron que desde las 2:00 o 3:00 de la mañana los empezaron a separar y a un grupo los dejaron libres  y a las otras 11 son las que están en Santa Martha. Me dijeron que al menos se veía tranquila. Eso fue lo más que pude saber de ella”, relata.

-¿Les han dado a conocer los cargos por los que fue detenida?

-Mira, aquí hay una limitante. Ella optó por tener abogados de la liga, de estos abogados de la institución que no cobran y que llevan los casos de manera colectiva, pero pues ya ves que también esto implica que a veces no puedan llevar un seguimiento tan puntual en cada uno. Entonces es la hora que yo no sé qué declaró. O sea, lo poco que me van diciendo los abogados que han estado con ella, pero que yo sepa exactamente bajo qué cargo está, no te lo digo con toda certeza, pero creo que es lo de la violencia extrema.

Un peregrinar que apenas está comenzando

“Es mucho miedo porque sabemos que esto es tan político, que depende de muchos factores, y que son cargos delicados. Son cosas que si no llevan una defensa adecuada, puede realmente truncar la vida de muchísimas personas y familias”, comenta Jessica.

Aunado a la poca información que han obtenido los familiares de Claudia Ivette Trejo por parte de las autoridades, los abogados de La Liga tan sólo les comentan que  “la ven tranquila”.

Ante ello, para la familia de Claudia ha iniciado un proceso de búsqueda y revisión de videos y fotografías en redes sociales, con el único de fin de presentarlas como pruebas de que ella no participó en los hechos de “vandalismo” y “desorden público” por los que las autoridades la detuvieron.

“Estuvimos revisando videos para las pruebas que hasta hoy -5 de diciembre- se van a desahogar, y sí, estuvo con Mariana, una chica de Filosofía. Entonces estuvo dentro de ese grupo –en Filomeno Mata- . Desde entonces no hemos podido verla”, comenta.

Y agrega: “también empecé a promoverlo en redes sociales, sobre todo que se viera que ella no estaba dentro del perfil de los que más llamaban la atención: encapuchados, destrozando cosas, destrozando inmuebles. Tratamos de establecer contacto –con Claudia- , pero fue muy complicado porque no fluye la información, es a cuentagotas lo que puedan decirnos, pero realmente ha sido como un peregrinar bastante horrible que apenas está comenzando”.

Imagen: Redes sociales.

Juntando pruebas en las redes sociales

Tras las diferentes manifestaciones que se dieron en el Distrito Federal la mañana del sábado, diversos medios de comunicación informaron el vandalismo que había sufrido la capital del país , y dieron a conocer la aprehensión de más de 100 personas e incluso condenaban la “barbarie” cometida por los participantes, en su mayoría universitarios.

Sin embargo, para el domingo 2 de diciembre el número de videos y fotografías sobre las irregularidades en la detención de los presuntos “vándalos” aumentaba en las redes sociales. Imágenes posteadas en Facebook, Twitter, Youtube, demostraban que las aprehensiones de algunos ciudadanos que sólo utilizaron su voz para manifestarse fue injustificada pues  no cubrían su rostro con pasamontañas e incluso no portaban ningún objeto como piedras, palos, tubos o bombas molotov.

Asimismo, distintas organizaciones, entre ellas el comité Cerezo, y defensores de los derechos humanos como Jesús Robles Maloof, denunciaron que entre los 69 detenidos tras los disturbios, hay personas que nada tenían que ver con las protestas, e incluso que en algunos casos se trata de académicos, estudiantes universitarios o  fotógrafos freelance.

Amnistía Internacional, por su parte, comenzó una colecta de firmas para presionar al gobierno de México para que no quede impune ningún abuso cometido el pasado sábado: “hace un llamado a las autoridades mexicanas para que respeten los derechos humanos de las personas detenidas durante los disturbios del 1 de diciembre e investiguen los hechos de forma imparcial. Es esencial que se respete la integridad física y mental, y el derecho a un juicio justo y al debido proceso de toda persona recluida y procesada”.

“Es imprescindible que el poder judicial y el ministerio público aseguren procesos justos para todas las personas detenidas y que aseguran su derecho a la asistencia letrada, el acceso a sus familias, a recibir atención médica y a la presunción de inocencia. La organización también hace llamado para que las denuncias y evidencia del uso excesivo de la fuerza contra manifestantes, periodistas y transeúntes durante los disturbios sean investigadas de forma pronta, imparcial y exhaustiva y den de conocer los resultados de la indagación”, dio a conocer en un comunicado.

Foto: Pablo Spencer | Es Imagen

Llama la atención que 69 personas fueron detenidas en las inmediaciones del enfrentamiento que se registró en Bellas Artes y que hasta el momento sólo se ha dado a conocer que  cuatro personas resultaron detenidas de los disturbios más violentos, los que ocurrieron en San Lázaro. Entre los detenidos a las afueras del Palacio Legislativo -se dio a conocer que se le giró una orden de detención cuando se encontraba hospitalizado-, se encuentra José Uriel Sandoval Díaz, estudiante de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM), quien perdió un ojo debido a un impacto de una bala de goma.

“Él no es un porro, estudia la Licenciatura en Medio Ambiente y Cambio Climático en la UACM y da talleres para niños en el Cerro del Judío en Iztapalapa. En la Cruz Roja de Polanco nos negaron información clara sobre su estado de salud y eso nos impidió conseguirle a tiempo un especialista. Él es de San Luis Potosí y aquí no tiene familiares, por eso varios profesores hicimos una comisión para ayudarlo”, según explicó al portal Animal Político un profesor que pidió el resguardo de su identidad.

“Mi hija se llama Mariana, estudia en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM y fue a la protesta con su novio Sergio. La detuvieron en Filomeno Mata. A mediodía le llamé porque vi lo que pasaba en las noticias. Me dijo que estaba cercada por granaderos, pero que estaban tranquilos. A la siguiente llamada me dijo que la Policía la había subido un camión”, comentó para dicho medio Lourdes Nieto, madre de Mariana.

Aún falta que las versiones y denuncias sean corroboradas y cotejadas con la información que presente la autoridad, sin embargo, los nombres e imágenes de Regina López Martínez, fotógrafa profesional y estudiante; Rosa María Vargas Rodríguez, Rafael Adrián Romero Escalante; así como Jéssica Viviana Reyna Camargo, Cinthya Hernández Carmona, Víctor Hernández Govea y otros más, circulan por Internet, en las redes sociales, con un mismo mensaje –el mismo que Jessica Trejo señala al ser entrevistada–, que no hay razón para  las detenciones.

INFORME PRELIMINAR DE LA INVESTIGACIÓN RELACIONADA CON LAS DETENCIONES
DEL 1º DE DICIEMBRE DE 2012