Hoy es el Día Internacional de la Libertad de Información, el Derecho a Saber, un derecho que en nuestro estado y en nuestro país es anecdótico pues no se respeta.

Parece que a los gobiernos no les ha quedado claro que la transparencia genera confianza. O quizás simplemente no les importa generarla. En Puebla de qué sirve contar con una Ley “de avanzada” –con sus criticables fallas- si no se cumple y, peor, si no se conoce. La mayoría de los ciudadanos, sobre todo en provincia, todavía ignora que tiene ese derecho a saber no sólo en qué se gastan los recursos públicos, sino por qué se están tomando las decisiones.

Exijamos el cumplimiento de ése y todos nuestros derechos. Es también labor de la sociedad civil organizada difundirlo, compartirlo y ejercerlo.

No es de extrañarse que, al no haber confianza en nuestras autoridades, persista la impresión de que pase lo que pase con la reforma laboral ya sabemos, al final, quiénes saldrán perdiendo.

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Con No Ficción, que estará dedicado a la crónica periodística y al periodismo narrativo, cerramos nuestra oferta de suplementos. El primer viernes de cada mes Lado B se pintara de morado para albergar a Reversible, el siguiente viernes mutaremos a naranja para uniformarnos con Pop Crimes!, 8 días después el espacio será para Cubo de Rubik para cerrar con el elegante negro de No Ficción.

Y para la primera entrega de No Ficción trazamos una línea que va de México a tierra del fuego, es decir que cruza por desgracia a toda América Latina: el narcotráfico.

La oferta narrativa del periodismo latinoamericano, que en este número pasa lo mismo por revistas de nuevo cuño como Anfibia que por publicaciones de larga tradición como The Clinic, Letras Libres o El Faro –cada un con sus respectivas diferencias– no se limita al texto escrito, por ello tenemos una crónica en audio producida por Radio Ambulante y un ensayo fotográfico que además acompaña a todos los textos presentados.

Tómelo con calma que no son textos cortos ni complacientes por la temática que abordan, pero no por ello dejan de lado que se trata de contar historias, no sólo noticias, claro, historias de no ficción.