Lado B
Enviado el 15/04/2021 Nosotras, las cuidadoras
Por Lado B @ladobemx
15 de abril, 2021
Comparte
 

Ahora que estamos juntas…

 

 

 

Recuerdo con mucha claridad que los sábados mi mamá se la pasaba lavando todo el día, le daba la noche y ella seguía detrás del lavadero. A veces a esa hora mi papá le acercaba una cubita. Ay, mi mami, su recuerdo me da ternura, pero al mismo tiempo es como un golpe de realidad muy cabrón.

Éramos cuatro, y aunque siempre le ayudaba a mi má, no voy a negar que lo hacía muy a mi pesar, siempre pensando por qué no dejaba esa actividad para otro día, para luego. “¿Pero luego cuándo?”, recapacito ahora. Ella trabajaba de lunes a viernes y, haciendo cuentas, en realidad no descansaba nunca.

Pero además, mi mamá siempre aceptaba con gusto a una o dos personas extras, una fila de primos y primas vivieron en casa mientras cursaban sus estudios. Lo sorprendente para mí es que jamás escuché a mi mami quejarse, o decir ya no puedo, o faltar al trabajo.
Yo siempre me siento exhausta y ni hijos tengo

Creo —y como bien saben, estas son ideas lanzadas al mar, así que si alguna ola las trae revolcadas de regreso son bienvenidas— que es el mismo sistema patriarcal que romantiza la maternidad, nos obliga a encajar en un estereotipo, y funciona perfecto para el capitalismo salvaje, lo que impulsaba a mi mami.

Un sistema que nos mandata a las mujeres a hacernos cargo, e incluso a asumirlo gustosamente. Y con esto no quiero decir que mi mami nos odiara u odiara lo que hacía por su familia (espero… nocierto, mami… mi mami ni me lee, jajaja), pero tampoco tuvo opción.

El sistema no está pensado para retribuirnos por ese tiempo destinado a los cuidados, pero el trabajo que las mujeres hacemos en casa sí aporta al PIB del país; el sistema no le retribuye a las mujeres que tienen hijos o hijas con alguna discapacidad, que requieren atención 24/7, con el reto que ello implica en términos económicos y socioemocionales, pero sí les recrimina socialmente y obstaculiza su acceso a tratamientos alternativos; el sistema no considera jamás a las mujeres —porque siempre es otra mujer la que se hace cargo— que maternan y cuidan a hijos e hijas en orfandad después de un feminicidio, vaya, difícilmente les garantiza justicia. 

Es un sistema perfecto para el patriarcado

 

 

 

Para leer completo el boletín que todos los jueves realiza Mely Arrellano para hablar sobre Feminismo, regístrate aquí.

 

 

Comparte
Autor Lado B
Lado B
Información, noticias, investigación y profundidad, acá no somos columnistas, somos periodistas. Contamos la otra parte de la historia. Contáctanos : info@ladobe.com.mx
Suscripcion