Lado B
La mitad de Huauchinango, sin apoyos después de Earl
Presidentes auxiliares, jueces de paz e inspectores denuncian la urgencia de rehabilitar 8 caminos y la reubicación de 58 familias
Por Samantha Paéz @samantras
20 de octubre, 2016
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Papatlatla, Huauchinango. Agosto, 2016 Foto: Marlene Martínez

Papatlatla, Huauchinango. Agosto, 2016
Foto: Marlene Martínez

Samantha Páez

@samantras

Después de dos meses del paso de la tormenta Earl, que causó la muerte de por lo menos 51 personas, los apoyos para la reconstrucción de Huauchinango no han llegado a 15 de las 26 juntas auxiliares.

Presidentes auxiliares, jueces de paz e inspectores de Cuacuila, Tenango de las Flores, Papatlatla, Cuautlita, Puga, Alseseca, San Miguel Acuautla, Xilocuautla, Matlaluca, Papatlazolco, Ayohuixcuacutla, Michuca, Teopancingo, Ocpaco y El Mirador denunciaron, en una rueda de prensa el miércoles (19 de octubre), que desde el desastre sólo llegaron despensas, ropa y agua potable, muchas de ellas proporcionadas por organizaciones y empresas.

Sin embargo consideraron urgente la rehabilitación de ocho caminos que comunican a los poblados, dos bardas de contención para que no se afecte una clínica y un camino, así como la reubicación de 58 familias.

Vale la pena recordar que para apoyos inmediatos el gobierno de Puebla solicitó 135.2 millones de pesos a través del Fondo de Desastres Naturales (Fonden), una parte de esos recursos se destinó a 667 monederos electrónicos de 5 mil pesos para la compra de electrodomésticos y otra parte para 27 seguros de vida de 90 mil pesos para familiares de las personas fallecidas.

Es decir, en electrodomésticos y seguros de vida se erogaron más de 5.7 millones de pesos, quedando libres para obra pública 129.4 millones.

Xaltepec, Huauchinango. Agosto, 2016 Foto: Marlene Martínez

Xaltepec, Huauchinango. Agosto, 2016
Foto: Marlene Martínez

Urgen obras

Lorenzo Antonio Dolores Victoriano, vecino de la junta auxiliar de Cuacuila, leyó un posicionamiento donde se exige la ejecución de las siguientes obras:

  • Rehabilitación del tramo carretero de 2.5 kilómetros que comunica a la cabecera municipal de Huauchinango con Cuacuila.
  • Rehabilitación del tramo carretero de siete kilómetros que va de la junta auxiliar de Venta Grande a la comunidad de Teopancingo Bajo.
  • Rehabilitación de la avenida Juárez en la comunidad de Ocpaco, son 800 metros en dirección al barrio del Centenario.
  • Rehabilitación del camino de la comunidad de Nopala, hacia Alseseca, con una extensión de cuatro kilómetros.
  • Rehabilitación del tramo carretero de cinco kilómetros que va de Cuautlita hacia Nuevo Necaxa.
  • Rehabilitación del camino de tres kilómetros que comunica del barrio de Tzahuinco, de Tenango de las Flores, a la comunidad de Acatlán.
  • Rehabilitación del tramo carretero que comunica a la junta auxiliar de Nopala con la comunidad de Matlaluca, de aproximadamente cuatro kilómetros.
  • Rehabilitación de la vialidad que comunica a la colonia 5 de Mayo de Huauchinango, a la comunidad de Puga y la junta auxiliar de Venta Grande, son cinco kilómetros.
  • Construcción de muros de contención para la clínica del IMSS de la comunidad de Cuacuila.
  • Construcción de muro de contención de la avenida Principal en la comunidad de Papatlazolco.

Los lineamientos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) indican que la evaluación de los daños en infraestructura corresponde a la dependencia o entidad que esté a cargo. Además para apoyos inmediatos el gobierno del estado debe entregar una lista de obras y acciones a ejecutarse en un plazo máximo de 30 días.

Es decir, que en este caso el Ayuntamiento de Huauchinango y el gobierno del estado debieron incluir las ocho obras carreteras en el diagnóstico del Fonden, para que se asignaran los recursos correspondientes. En cambio, el gobierno poblano primero decidió entregar monederos electrónicos para la compra de electrodomésticos por 3 millones 335 mil pesos.

Jorge Hernández Cabrera, de la organización Sierra Norte Energía y Movimiento, recalcó que tampoco se han realizado obras de prevención o mitigación, por lo cual teme que en caso de que sigan las lluvias en Huachinango haya más deslaves y deslizamientos de tierra.

Para el activista otra cuestión preocupante es que los presidentes municipales permiten la venta de terrenos en zonas irregulares, situación de la cual obtienen beneficios económicos, para luego regularizar los asentamientos sin importarles los riesgos que hay para los habitantes.

Papatlatla, comunidad de Huauchinango Foto: Marlene Martínez

Papatlatla, comunidad de Huauchinango. Agosto, 2016
Foto: Marlene Martínez

Familias desprotegidas

Hace dos meses el presidente auxiliar de Cuacuila, Eugenio Pérez Ahuacatitla, logró evitar muertes en la población al desalojar a los pobladores de zonas de riesgo después de horas de lluvia. Días después de la catástrofe, el edil dijo que 155 casas se vieron afectadas, por lo que decidió instalar un albergue en la alcaldía para que las familias no tuvieran que ira hasta la cabecera municipal.

Al día de hoy 48 familias necesitan un nuevo hogar, pues el suyo se lo llevó el lodo o la tierra. Pérez Ahuacatitla dijo que muchas de esas familias viven en condiciones inhumanas, pues se fueron con familiares o vecinos, pero no tienen el espacio y los suficientes servicios suficientes.

A la semana siguiente de las lluvias torrenciales, la Secretaría de Economía y de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), en conjunto con funcionarios estatales, realizaron un censo de las viviendas dañadas para reubicar a sus residentes o brindarles apoyo para la reconstrucción de sus hogares. Pero los apoyos sólo alcanzaron a dos terceras partes de los afectados en Cuacuila.

Otras diez familias en Papatlatla, junto a Xaltepec, el poblado más afectado por las lluvias, están en la misma situación.

Xaltepec, Huauchinango Foto: Marlene Martínez

Xaltepec, Huauchinango. Agosto, 2016
Foto: Marlene Martínez

Sólo para la foto

Para Alfredo Gutiérrez Vázquez, presidente auxiliar de Tenango de las Flores, los funcionarios -incluyendo a la titular de la Sedatu, Rosario Robles Berlanga; al gobernador Rafael Moreno Valle Rosas, y al alcalde Gabriel Alvarado Lorenzo- sólo fueron a tomarse la foto, porque la ayuda no ha llegado a las comunidades afectadas.

Por ejemplo Tenango de las Flores, sitio conocido por sus viveros y por sus esculturas en arbustos, requiere de un camino que conecte a la cabecera municipal.

Jesús Tomás Hernández, juez de paz de Puga, dijo que el presidente municipal de Huachinango reprimió a la comunidad por denunciar la falta de apoyos. De un mes para otro recortó en 50% las participaciones de la junta auxiliar, de tal forma que ahora sólo reciben 3 mil 728 pesos.

Denunció también que a todas las personas las quieren reubicar en un solo terreno, lejos de sus comunidades y de sus tierras de siembra, motivo por el cual muchas familias no se han querido salir de sus casas.

A la junta auxiliar de Teopancingo Bajo le urge un nuevo camino, contó Roberto Hernández Hernández, inspector del pueblo, ya que se dedican al turismo y a la crianza de truchas para venderlas en estado de México, Puebla, Hidalgo y Tlaxcala. Sin esa vialidad las actividades económicas en el poblado estarían prácticamente detenidas.

Llaman a reunión

Luego de que los representantes de las comunidades de la Sierra Norte denunciaran que la Secretaría General de Gobierno (SGG) desatendió durante dos meses sus llamados y oficios, al finalizar la rueda de prensa funcionarios de esa dependencia invitó a los inconformes a realizar una mesa de trabajo y, según consta en el boletín 296, gestionará una reunión con Gabriel Alvarado.

Minutos antes de que se les convocara a Casa Aguayo, sede de la SGG, los presidentes auxiliares, jueces de paz e inspectores presentaron oficios dirigidos al titular de la secretaría, Diódoro Carrasco Altamirano, en los cuales informaban la situación de las comunidades y la falta de diálogo con el gobierno municipal.

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Autor Lado B
Samantha Paéz
Soy periodista y activista. Tengo especial interés en los temas de género y libertad de expresión. Dirigí por 3 años el Observatorio de Violencia de Género en Medios de Comunicación (OVIGEM). Formo parte de la Red Puebla de Periodistas. También escribo cuentos de ciencia ficción.
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