Ernesto Aroche Aguilar

@earoche

En Puebla el robo de combustible ha crecido exponencialmente en este sexenio, el incremento de tomas clandestinas detectadas por Petróleos Mexicanos (Pemex) es ya de mil 583 por ciento con respecto al último año del gobierno anterior, de acuerdo con información que fue entregada a esta casa editorial por la paraestatal.

Un delito que, según reconoció por primera vez en el sexenio el procurador del estado, Víctor Carrancá, en una entrevista que ofreció al programa Punto de Partida, es responsabilidad del grupo delictivo de Los Zetas.

El reporte revela también que ni la detención de directivos de la Policía Estatal ni la renuncia del anterior secretario de Seguridad Pública, Facundo Rosas Rosas, detuvo o menguó la incidencia en el delito.

Y que la problemática de seguridad pública que cruza el estado en su parte central se concentra en cinco municipios: Tepeaca, Quecholac, Acatzingo, Palmar de Bravo y Acajete, pues en estas cinco demarcaciones se registró el 68 por ciento de las 825 tomas clandestinas registradas en el estado durante todo 2015.

Una tendencia que se mantiene en el arranque de 2016, pues en enero el número de tomas clandestinas llegó a 76 casos, esto representa un incremento de 49 por ciento con respecto al mismo mes del año precedente. Y con prácticamente los mismos municipios como los espacios geográficos en donde se concentran las tomas clandestinas.

También resalta el repunte del delito en la Sierra Norte, en el corredor Xicotepec–Venustiano Carranza–Huauchinango, aunque todavía lejano de los niveles que se observan en el corredor central del estado que va de los linderos de Veracruz a los linderos con el DF pasando por la capital poblana.

Detienen a policías, pero no se detiene saqueo

En julio del año pasado el Ejército detuvo a dos policías estatales involucrados en la protección a delincuentes vinculados con el robo de combustible. Y no dos agentes cualquiera, sino al director de la Policía Estatal Preventiva, Marco Antonio Estrada López, y al jefe del Grupo de Operaciones Especiales, Tomás Méndez Lozano.

En consecuencia, dos semanas después el entonces secretario de Seguridad Pública, Facundo Rosas Rosas presentó su renuncia.

Pero nada cambió, pues la incidencia del delito se mantuvo y hasta repuntó para el mes de septiembre, cuando el total de tomas clandestinas llegó a 93, la cifra mensual más alta en los últimos 15 años.

Lo único que trajo consigo la detención de los policías y la salida del responsable de la seguridad pública en el estado fue el incremento de la violencia y las ejecuciones en la zona.

En los últimos meses se han registrado al menos dos enfrentamientos entre bandas criminales y miembros del Ejército.

El caso más reciente se produjo el 20 de enero pasado, La Jornada de Oriente dio cuenta del suceso de la siguiente manera:

“Un comando de medio centenar de personas dedicadas al robo de combustible a ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex), mejor conocidos como chupaductos, se enfrentaron a balazos con militares, anoche en la comunidad de San José Bellavista, en el municipio de Palmar de Bravo.

“El saldo que se maneja según versiones del poblado, que se encuentra bajo el control de los chupaductos, es un lesionado por arma de fuego y seis militares retenidos en la población”.

La información fue confirmada al día siguiente por el secretario de General de Gobierno, Diódoro Carrasco que incluso anunció la detención de cinco personas producto de ese enfrentamiento.

Se disparan violencia y homicidios

El sonido de las armas de grueso calibre, R15 y Cuerno de Chivo se ha vuelto muy conocido en la región. En julio del año pasado alrededor de 300 casquillos fueron recogidos en uno de los barrios de la junta auxiliar de San Miguel Xaltepec en Palmar de Bravo. Junto con los casquillos también se levantaron los cuerpos de tres hombres que fueron ejecutados, según reportó la prensa regional.

En total, el municipio sumó durante 2015 un total de 11 averiguaciones previas –que no significa que sea el mismo número de persona asesinada– por homicidio doloso con arma de fuego. La cifra más alta a nivel municipal sólo superada por Puebla capital que contabilizó 33 casos durante todo 2015.

Detrás quedaron municipios como Tehuacán o Atlixco con 10 y ocho casos respectivamente.

Aunque si se observa las tasas por cada 100 mil habitantes, una cifra que nos permite comparar poblaciones con diferentes densidad, Palmar de Bravo es por mucho el municipio con el mayor número de averiguaciones previas por homicidio doloso de todo el estado, pues la tasa se dispara a 25.6 averiguaciones previas por cada 100 mil habitantes, mientras que en Puebla con 33 casos la tasa es apenas de 2.14 averiguaciones por cada 100 mil habitantes.

Incrementos de hasta 3 mil por ciento

Aunque el repunte de la incidencia a nivel estatal es de mil 583 por ciento, al pasar de 49 tomas clandestinas en 2010 a 825 para el cierre de 2015, hay algunos municipios en donde el crecimiento alcanza cuotas por arriba de 3 mil por ciento, como sucede con Tepeaca y Palmar de Bravo.

En el primer caso pasamos de 4 tomas clandestinas al cierre del sexenio pasado a 159 en el quinto año de gobierno de Rafael Moreno Valle, lo que representa un incremento de 3 mil 875 por ciento. Mientras que en el segundo se pasó de cuatro puntos de robo de combustible detectados en un año a 95 para el segundo año de referencia.

La sierra también en el escenario

Otro de los datos que resalta de la información que entregó la paraestatal a una solicitud de información es lo que sucede en los municipios serranos de Venustiano Carranza, Huauchinango y Xicotepec, pues durante 2010 no registraron una sola clandestina y para 2015 la cifra en conjunto llegó a 36 puntos detectados.

El caso más llamativo es Xicotepec, que fue hasta este 2015 cuando registró tomas clandestinas, un total de 14, la cifra más alta de los municipios serranos