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Los vinos rosados

Por Lado B @ladobemx

20 de diciembre, 2015

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Gabrielle Yáñez | Daniel Valdés

[dropcap type=»1″]B[/dropcap]ienvenidos a esta columna del saber, donde aprenderemos desde lo más sencillo hasta donde la imaginación nos permita acerca del vasto e infinito mundo del vino.

Empezaremos con un tema sencillo pero a su vez poco conocido: el vino Rosado. Si bien no es cotidiano, para muchos de nosotros el consumo del vino, desde los que incursionan hasta los más experimentados, sí forma parte de nuestro estilo de vida y si bien existen diversas preferencias generalmente distinguimos entre vino tinto o vino blanco, pero ¿qué pasa con el vino rosado?

Se puede decir que solo es para ocasiones en las que no se sabe que llevar o hay quienes lo catalogan como un vino que como se dice “nos saca del apuro” pues se considera como algo intermedio entre el blanco y el tinto, pero en realidad el vino rosado tiene mucho más que ofrecernos. Podemos decir que el vino rosado posee la frescura de los blancos y al mismo tiempo conserva los matices aromáticos del vino tinto. Estos vinos se elaboran de manera diferente al vino tinto pero a partir de las mismas cepas, sin embargo hay algunas que se prefieren, como la Cabernet Sauvignon, Zinfandel, Syrah, Merlot, Garnacha o la Tempranillo. Su elaboración se realiza mediante un proceso de maceración entre el jugo y el hollejo (o cáscara de la uva), hasta lograr el color deseado pues recordemos que es precisamente esto lo que le da el color al vino. Por lo tanto estos vinos adquieren características únicas, ya que se pueden apreciar aromas similares a los vinos tintos, como moras, frutos rojos, rosas, entre otros, pero siempre con la fragilidad y delicadeza que los caracteriza. Los sabores incluyen la gama de los frutos rojos, flores y cítricos, aunque claro que esto dependerá de la uva con la que se elaboren y del país de procedencia. Sus tonalidades van desde un rosa pálido, hasta los tonos salmón o guinda. Éstos vinos tienden a ser jóvenes y de consumo inmediato, no recomendamos guardarlos ya que pierden su frescura y aromas frutales. La temperatura de servicio debe estar entre 6 y 10 grados.

En general suelen maridar bien con la comida asiática pero también con nuestra gastronomía, y para esta época del año tan especial que nos invita a convivir y festejar, serán de excelente armonía para los platillos típicos de la temporada. Así los vinos rosados son una excelente opción que satisfacerá desde el paladar más conocedor hasta los más suaves y poco experimentados.