Foto Lado B

La fuente de la China Poblana y su zona aledaña tiene, desde hace unos días, un par de habitantes más que duermen sobre la calle. Uno de ellos se cubre de la intemperie con hojas muertas, la otra comparte el calor con su gato y un ave. Ella de grandes ojos se cubre el cuerpo con un top, y un pantalón negro lleno de grecas y aplicaciones. Él de ojos más bien rasgados y largos entrelaza sus manos y sus piernas para protegerse del frío y la lluvia. Nadie los molesta. Los dos nacieron de varias decenas de latas de aerosol y unas cubetas de pintura, uno está firmado “Pésimo”, la otra lleva el sello de “Entes”.

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−Eso es una pérdida de tiempo

Joan Edmundo Jiménez Suero escucha a su padre, un profesor de matemáticas, desdeñar por enésima ocasión su interés por el dibujo. Las palabras con las que José Antonio Jiménez pretende zanjar el tema y terminar con  la hoja en blanco y los lápices de colores que Joan Edmundo atesora lo único que lograrán a la larga será llevar al pequeño hacia las paredes.

Unos años más tarde, y mientras estudia la carrera de artes plásticas en Corriente Alterna, una escuela de bellas artes ubicada en el barrio de Miraflores en Lima, Perú, conoce a Edwin Higushi, otro apasionado de los muros y el color. En el año 2002 Edwin y Joan comienzan a trabajar juntos firmando sus trabajos como “Pésimo y Entes”.

10 años después la calidad de su trabajo y sus expresivos y coloridos personajes, criollos igual que ellos –Entes arrastra genes japoneses en su ADN, Pésimo sabe que por sus venas corre sangre negra–, los ha llevado de las calles a las galerías de arte.

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Y de ahí al video: corre el minuto con 34 segundos, en la pantalla una mano toma la lata de aerosol mientras la voz de la colombiana Totó la Momposina enlista todo aquello que el dinero no puede comprar: el viento, el sol, la lluvia, el calor… La mano es de Pésimo, quien junto con Entes dibujarán sobre una pared a una madre abrazando a su hijo mientras caen gruesas gotas de lluvia. 30 segundo más tarde, y después del estribillo que se reparten Totó la Momposina junto con la peruana Susana Baca y la brasileña María Rita llega la voz de René Pérez, el portorriqueño mejor conocido como Residente, que encabeza la agrupación Calle 13.

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Los dos personajes que duermen en la acera del bulevar 5 de mayo esquina con la 48 poniente son parte de la huella que dejaron en el país Entes y Pésimo. Su visita a tierras mexicanas los llevó ya a Pachuca, al DF, pasaron por Cholula y se dieron el tiempo –un fin de semana— para terminar el largo mural. Llegaron invitados por “Renacimiento Urbano”, el nombre bajo el que se encierra una serie de actividades artísticas relacionadas con el arte urbano o arte callejero que tiene como sedes las ciudades ya enlistadas y que contempla talleres, exposiciones, proyección de documentales e intervención de calles, muros y paredes.

En el Distrito Federal pintaron sobre el muro de cinco pisos de una escuela primaria en la colonia Moctezuma, en Hidalgo intervinieron un muro frente al reloj de la plaza central y un estudio de la empresa Alux Media, lo que permitió además la toma de video que llevará animación y que está en producción en aquella compañía mediática. En Cholula sus intervenciones, sin dejar de ser personajes, son una referencia al paisaje volcánico de ese municipio poblano.

−Nosotros observamos mucho la calle −cuenta a LADO B Entes al ser cuestionado sobre su trabajo en las calles angelopolitanas— somos como una especie de “vedores”. Y ahí nos encontramos con gente durmiendo en la calle, gente que es como nosotros, que tal vez perdió el trabajo, se volvió loca o se hicieron adictos, y también hay que mirarlos y entenderlos. Esto un acercamiento a eso, más que otra cosa.

Fotos: Marlene Martínez

Y los personajes ahí, que dormitan o ven pasar el tiempo, los días, las horas, confirman su procedencia, tiene las formas, los colores, el sello pues de los dos graffiteros peruanos a quienes se les señala como parte del movimiento de ese país que revitalizó el graffiti como una expresión artística más allá de las rayas –tags— o las bombas –bombing— que tradicionalmente pueblan los muros.

—Lo que se busca con Renacimiento Visual –explica Jeavi Mental, uno de los responsables de que los peruanos estén reviviendo ese largo muro a un costado de la fuente de la China— es un esfuerzo por mostrar a la juventud en zonas no tan locas como la ciudad de México, en donde empieza a verse un graffiti  al que si no se ofrece alternativas  puede convertirse dentro de poco un problema de contaminación visual. La idea es presentar lo que se está haciendo y ojalá así la banda deje de hacer ese Bombing y Taggin que muchas veces no tiene calidad o es muy vacío. Mientras que hay otro que se está haciendo en otras latitudes de América Latina o de Asia que te transmiten sentimientos y valores como la familia, uno de los temas que tocan Pésimo y Entes.

Pero Entes ya no nos escucha, se puso de nuevo los enormes audífonos blancos y regresó a pintar lo que para ese momento no es más que un manchón de color azul, y que un par de días después será un par de pequeños pies entrelazados con una ave de largo cuello.

Trabajo en Cholula. Foto tomada del FB de Entes y Pésimo

Trabajo en Cholula. Foto tomada del FB de Entes y Pésimo