Foto: Paco Coca

Ernesto Aroche Aguilar

@earoche

Y como en cada proceso electoral, la ciudad se llenó de publicidad política: anuncios espectaculares, vallas, bardas y camiones rotulados con la cara de equis o ye candidato son la cotidianidad desde el pasado 30 de marzo que se dio el banderazo de inicio a las campañas, con una salvedad: se endurecieron penas y sanciones primero desde el Instituto Federal Electoral (IFE) y después desde el ayuntamiento para evitar que esa publicidad se desbordara y tomara por asalto árboles, postes de luz y mobiliario urbano en general, como sucedió en procesos pasados, también quedó a resguardo del refuego electoral el Centro Histórico capitalino.

Foto: Paco Coca

Esto no ha impedido que los candidatos y aspirantes a ocupar un cargo de elección popular incurran en violaciones a la ley al colocar su publicidad, una publicidad que a decir de especialistas sólo sirve para posicionar al candidato en la mente de los votantes pero que pocas veces transmite información de peso sobre sus plataformas políticas, en espacios prohibidos, lo que les ha acarreado ya multas tanto de las autoridades locales como electorales.

Hasta el momento, y de acuerdo con un recuento realizado por el Centro Empresarial de Puebla (Coparmex) a través de reportes ciudadanos, es el PRI el partido que más espacios publicitarios ocupa, lo mismo en espectaculares que en publicidad móvil a través de camiones –el perifoneo no ha sido contabilizado–, aunque podría ser la campaña de los panistas usando reproducciones “gigantes” de sus candidatos quienes podrían obtener un mejor resultado, estiman especialistas.

Gigantes vs espectaculares: su misión, fijar en al memoria

Leandro Rodríguez Medina, doctor en sociología por la Universidad de Cambridge y profesor de tiempo completo en la Universidad de las Américas (Udlap), explica que la publicidad de anuncios espectaculares se usa para que el electorado conozca y ubique al candidato, “no hay ningún campaña que se haya ganado en base a espectaculares, ni en México ni en los países democráticos”.

Foto: Paco Coca

Aunque puntualiza que en muchos países el uso de los espectaculares, del tamaño que se tienen y su colocación en sitios como el periférico, están prohibidos pues generan mucha contaminación visual y pueden desconcentrar a los automovilistas que transitan por vías rápidas.

“Lo que sucede en México, se tiene un electorado muy visual, que no hace mayor análisis, no hablo del 100 por ciento, pero sí de un porcentaje importante que justifica el inversión que se hace en ese tipo de publicidad”.

Para el ex coordinador de la Maestría en Comunicación Pública de la Udla y también investigador en ciencia política, el uso de estrategias novedosas puede tener un mayor impacto pero deben ir de la mano de una buena localización de los anuncios.

En ese sentido, el uso de los “gigantes” del Partido Acción Nacional puede ser una buena estrategia, “original y novedosa para México”, para conseguir impactar en los electores la imagen del candidato, pues esa es la intención de los espectaculares, pero nada más.

Inundada pero no desbordada

Foto: Paco Coca

El pasado 26 de marzo, unos días antes del arranque de las campañas, el secretario de Medio Ambiente y Servicios Públicos del ayuntamiento capitalino, Alejandro Fabre Bandini anunciaba “los parámetros para la colocación y fijación de propaganda electoral”.

Fabre Bandini explicaba que tras la reforma del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales del 2007, quedó prohibida la instalación de publicidad electoral en el equipamiento urbano, especialmente en postes de alumbrado público, parabuses, infobuses, sillones de bolero y estructuras de puentes peatonales y vehiculares.

Y que los partidos y los candidatos podrían hacer uso de los espacios privados: vallas publicitarias, anuncios autosoportados de propaganda, anuncios electrónicos, espectaculares, vehículos con publicidad móvil, volantes y bardas, siempre y cuando no sea en la zona de monumentos.

Y es que el Código Reglamentario Municipal (Coremun) restringe la colocación de todo tipo de propaganda, incluida la electoral, en la zona de monumentos, es decir, el Centro Histórico, Zona de los Fuertes Loreto y Guadalupe, El Carmen, Barrio San Antonio, Barrio San José, Santa Anita, Analco, El Alto, Santiago, San Miguelito, Xanenetla, El Refugio, Xonaca, Los Remedios y la Avenida Juárez.

Cualquiera que infrinja este reglamento se hará acreedor a una multa que puede ir desde mil 700 pesos hasta 177 mil pesos.

“Yo estoy feliz”, sostiene José Carlos Montiel Solana, presidente de Coparmex en Puebla, “pues con las modificaciones a la ley los pendones que antes cubrían prácticamente postes de luz y demás no los estamos viendo en este proceso porque generan una cantidad importante de basura, es plástico, eso era dinero tirado a la basura”.

Montiel Solana, quien desde Coparmex encabeza el programa Testigo Ciudadano, un proyecto para realizar una auditoría ciudadana al gasto publicitario por parte de los partidos y los candidatos en este proceso electoral, sostiene además que la publicidad que más ha impactado entre el electorado poblano son los anuncios espectaculares, pues es del que más reportes se tienen en la plataforma electrónica que se instaló para ello.

“Los mensajes se pueden enviar vía SMS o directamente desde la página de internet, es un programa que nos costó trabajo para involucrar a la gente, pero que tras el primer mes –reportado a principios de mayo— ha tenido ya un repunte importante en cuanto a la participación de la ciudadanía”.

Ese primer reporte contabilizó 196 anuncios en la ciudad entre espectaculares, vallas publicitarias, bardas y camiones rotulados, y ubicó al PRI como el partido con el mayor porcentaje de anuncios, prácticamente la mitad –48% por ciento, aunque si se agrega el del PVEM llegaría hasta el 53 por ciento.

En segundo lugar se ubicó el PAN con el 30 por ciento, los partidos de izquierda coaligados con un 9 por ciento y Nueva Alianza con un 8 por ciento.

¿Sanciones y luego?

En las primeras semanas del proceso electoral se clausuraron anuncios en puentes vehiculares, propaganda colocada sobre buzones de correo e incluso alguna que se colocó sobre postes de luz, lo mismo del PAN, del PRI, del PVEM y de Nueva Alianza según dio a conocer Fabre Bandini.

Pero no han sido los únicos casos: Blanca Alcalá y Javier Lozano, ambos candidatos al Senado, han recibido multas por parte de las juntas distritales del IFE por instalar publicidad o en lugares prohibidos como le pasó a la priísta por colocar publicidad en periférico ecológico, o al panista por montar sus espectaculares sobre mobiliario urbano.

Por su parte el panista Néstor Gordillo, quien a decir de algunos columnistas como el director del portal e-consulta, Rodolfo Ruiz, ha rebasado ya los topes de gasto de campaña, también fue sancionado por el IFE con 38 mil pesos por utilizar mobiliario de la ciudad.

Foto: Paco Coca

Los candidatos presidenciables del PRI, Enrique Peña Nieto, y del PAN, Josefina Vázquez Mota, también han recibido multas. El priísta junto con los partidos que lo postulan fue sancionado por utilizar las cabinas de teléfono para instalar su publicidad. Para la panista la multa fue por utilizar vallas publicitarias fijadas a las banquetas lo que a decir de la resolución del IFE —JD/PE/PT/JD11/PUE/4/2012— las vuelve mobiliario de la ciudad.

Aunque las sanciones han sido, de acuerdo con algunos consejeros distritales muy bajas, prácticamente anecdócticas pues no hacen mella en sus campañas a pesar de que la mayoría de los casos se trata de avenidas importantes y de mucha afluencia, es decir se ha tratado de propaganda de impacto altamente significativo en la ciudadanía.

(Con información de Paco Coca)