Bajo la advertencia del gobernador Miguel Barbosa de que “un año escolar más no presencial va a afectar de fondo al sistema educativo mexicano”, el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Melitón Lozano Pérez, anunció que el regreso a aulas de educación básica en Puebla podría ocurrir en agosto, para lo que será necesario que docentes, personal administrativo y de intendencia estén vacunados contra la COVID-19; sin embargo, hasta el momento no hay una fecha para que inicie la inoculación de este sector. 

Además, el secretario de Educación destacó que también se tiene que seguir un proceso de preparación que consta de cinco etapas: uno, el cierre del ciclo escolar actual; dos, el seguimiento de las acciones solitarias; tres, formación para atender la diversidad y las condiciones de cada estudiante y escuela, que son diferentes en cada región; cuatro, la fase compensatoria de los aprendizajes, y la quinta etapa es el acondicionamiento de las instituciones para el regreso a clases.

Para eso se ha diseñado el documento “Lineamientos para el regreso escolar seguro en educación obligatoria”, en donde se podrán consultar todos los requerimientos para que se dé este regreso a las aulas escalonado y con los protocolos de seguridad obligatorios. Este será habilitado la tarde de hoy en la página web de la SEP.

Por otro lado, en el caso de la educación superior, Melitón Lozano señaló que solo habrá regreso a actividades académicas prácticas; para ello se aplicarán algunos criterios de elegibilidad: estudiantes cuya titulación depende de realizar prácticas de laboratorio o experimentos que no pueden aplazarse, y estudiantes de últimos semestres cuyas prácticas son prioritarias porque consolidan su desempeño profesional.

Además, Lozano Pérez dejó claro que el regreso a actividades prácticas en universidades es una decisión voluntaria y puntualizó que no se trata de un regreso masivo. Para que las instituciones de educación superior puedan retomar las actividades antes mencionadas tendrán que hacer una solicitud, conformar la documentación requerida para hacer evidente que cumplen con todas las regulaciones, e implementar las prácticas de sanidad requeridas, así como un monitoreo permanente de las mismas. 

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Este regreso a algunas actividades académicas prácticas dependerá del semáforo: mientras esté en rojo todas las actividades deberán realizarse a distancia; en naranja, se abrirán laboratorios de ciencias de la salud si las instituciones atienden a todos los criterios; en amarillo, se abrirán los laboratorios de las diversas licenciaturas como ingeniería y turismo, y otras más; y en verde se iniciaran las clases presenciales atendiendo los protocolos.

El resto de los criterios de elegibilidad se encuentran en otro documento titulado “Lineamientos para la reanudación de actividades académicas prácticas en instituciones de  educación superior” que también se habilitará por la tarde en la página de la SEP. 

Tras el anuncio, la primera institución en revelar que retomará actividades prácticas es la Ibero Puebla, para lo que aplicará un modelo híbrido de educación semipresencial —60 por ciento de las asignaturas presenciales y el 40 por ciento de forma digital—, beneficiando a los ramos médico y científico.

Esto podría ocurrir una vez finalizado el periodo de verano, es decir, a finales de mayo, y solo si el semáforo continúa en amarillo, anunció el rector de dicha universidad, Mario Patrón. También se aplicará un automonitoreo en casa donde las y los alumnos, así como el personal docente y administrativo, tendrá que llenar un formulario con la sintomatología y, previo a la entrada, personal médico revisará a cada persona que desee acceder a las instalaciones. 

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En tanto, el titular de la Secretaría de Salud, José Antonio Martínez García, informó que durante el fin de semana se registraron 388 contagios y 46 defunciones, por lo que Puebla acumula 81 mil 634 casos positivos y 11 mil 302 defunciones desde el inicio de la pandemia. 

Con información de Román Ocotitla

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