El Cabildo de la ciudad de Puebla acordó detener la instalación de bolardos en el Centro Histórico hasta que se realice un estudio de factibilidad que demuestre que el uso de esa herramienta vial es la más adecuada para la movilidad en la urbe poblana.
El punto de acuerdo que fue aprobado un día antes en la comisión de Patrimonio y Hacienda e incluía tres puntos: suspender la colocación de los bolardos, maceteros y biciestacionamientos; quitar los bolardos ya instalados en la zona del centro; y realizar un estudio para comprobar la factibilidad de estos recursos.
Aunque el acuerdo que aprobaron en lo general con 22 a favor y una abstención ya no incluyó el retiro de los bolardos ya instalados.
Sobre el tema la titular de la Secretaría del Ayuntamiento de Puebla, Liza Elena Aceves López, precisó que será la Secretaría de Movilidad, que en un plazo de 20 días, deberá informar al Cabildo los alcances de la propuesta, etapas de instalación, recursos utilizados y los nombres de los contratistas.
Y que el estudio a realizar deberá contener un replanteamiento del proyecto de movilidad considerando las propuestas que haga la ciudadanía, privilegiando a los grupos vulnerados, quienes utilizan transporte público y peatones.
Enfatizó que en el debate sobre la instalación de bolardos, no se deben perder de vista las necesidades de traslado de las personas como punto central de esta acción de gobierno, sin restar importancia a ciclistas y automovilistas.
Uno de los puntos de mayor debate en el Cabildo fue sobre si retirar o no, de los bolardos ya instalados en los últimos días, y que tanto rechazo han generado en redes sociales.
Sobre ese punto la presidenta, Claudia Rivera Vivanco, expuso la necesidad de mantenerlos puesto que no se puede afirmar que algo funciona o no si se ha probado en un lapso razonable.
El síndico Gonzalo Castillo Pérez también se pronunció porque se quedaran los bolardo ya instalados, de otra manera, dijo, se estaría dañando el patrimonio de la ciudad y que no debería hacerse un gasto innecesario, puesto que hay compras que ya se hicieron y no se pueden suspender.
El regidor Jose Luis González Acosta pidió que se investigara la licitación de los bolardos: cuántos hay, cuántos se pondrán y en dónde; así como el precio de cada uno. También pidió que se investiguen los rumores de que la empresa de los bolardos es cercana a la Secretaría de Movilidad.
En tanto, la regidora Carolina Morales pidió que se socialice la información tanto con grupos de comerciantes del Centro Histórico, “que son algunos de los que se han quejado de las malas decisiones administrativas (la instalación de bolardos y macetones”, como con grupo de activistas de la movilidad no motorizada.
Entrevistada tras la discusión y aprobación del medida, Lydia Dení Gamboa, quien forma parte de Espacio Público de la Facultad de Filosofía y Letras de la BUAP, sostuvo que los regidores se resisten al cambio de paradigma en la ciudad en donde es el peatón el nuevo centro de las políticas de movilidad y no el auto.
Se trata, dijo, de una decisión “con base en prejuicios, sin poseer algún conocimiento técnico o algún análisis de las mejores prácticas [viales]. Entonces lo que se tendría que hacer es darles a conocer las mejores prácticas, la técnica que está detrás de lo que se está haciendo; tienen que conocer las condiciones de los peatones y ciclistas”.
(Con información de Dafne García)