Tendrán que pasar algunas semanas todavía para que tengamos certeza de qué va a pasar con la elección del 1 de julio. Declaraciones van y vienen y hasta el momento, sólo el Movimiento Progresista pedirá la invalidez de la elección a la presidencia de la República.

La declaración de Acción Nacional, en voz de Felipe Calderón, es que no se puede dar una “compra de votos” como la que sucedió en la pasada elección, sin embargo, no han sido contundentes en la defensa de la votación. Finalmente están convencidos del castigo de los ciudadanos al mandar a Josefina Vázquez Mota al tercer lugar. Gustavo Madero dice lo mismo, pero se niega a una negociación con la izquierda para la defensa del voto.

Hoy se dará a conocer la postura del Movimiento Progresista y su decisión se basa en la Constitución. Afirman que el artículo 41 ha sido violado, al no cumplir con los principios de certeza, imparcialidad, equidad, objetividad y profesionalismo y por ello pedirán la invalidación de la elección.

Sin duda, la elección estuvo tan plagada de irregularidades que en Puebla por ejemplo se pedirá la impugnación de siete distritos por los diferentes partidos y coaliciones.

Aún con un recuento, PAN y Movimiento Progresista, impugnarán la elección en el Distrito 6 que ganó el PRI, según las cifras del IFE. Esto quiere decir que no existe confianza, aún cuando ya se contó.

Monex, Soriana, compra de votos, rebasar los topes de campaña, un IFE que deja pasar denuncias sin tomar decisiones drásticas que den una respuesta a los ciudadanos. En fin, la elección que posiblemente regresará la PRI a los Pinos, será recordada como una de las peores en el país.