Hoy se cumplen tres años de una de las peores tragedias que han ocurrido en nuestro país. Una guardería subrogada al Instituto Mexicano del Seguro Social funcionaba en un predio que compartía con una bodega de archivos estatales. El incendio comenzó en los archivos y se propagó a la estancia infantil. En ese lugar había 176 niños de los cuales murieron 49 niños y 79 quedaron heridos.

Las  medidas de seguridad con las que funcionaba la guardería eran nulas. Nunca se tuvo el cuidado de instalar detectores de humo, salidas de emergencia adecuadas y utilizar materiales que no tuvieran un riesgo tan serio de propagar el fuego.

Los gobiernos de Felipe Calderón y Eduardo Bours, gobernador de Sonora en ese momento, a pesar de todas las declaraciones, pésames, y supuesta tristeza, nunca dieron una alternativa a los padres de los pequeños que murieron. Los funcionarios que eran los responsables del sistema de guarderías y el director del IMSS en 2009, Molinar Horcasitas, nunca tuvo que responder por esa responsabilidad.

Los padres de los niños muertos han recorrido kilómetros y kilómetros para pedir justicia y no la han encontrado. Además de la gran pena que ha marcado sus vidas, no han recibido de los gobiernos apoyo para poder superar la gran pérdida de sus hijos e hijas.

Desde luego que hubo algunas personas que fueron cesadas de sus puestos, no los verdaderos responsables que siguen como si nada.

Nuestra solidaridad a tres años sigue con las familias de los pequeños de la guardería ABC.

Hoy habrá diversas actividades en diferentes partes del país para recordar este hecho. En Puebla como cada año, las veladoras y quienes las prenden acompañarán a los padres en esta jornada de tristeza.