Lado B

Las escalinatas de la Catedral de St. Paul fueron el escenario en el que más de 10 mil estudiantes universitarios se manifestaron por los recortes que el primer ministro de Gran Bretaña, David Cameron, ha realizado, así como el alza al costo de las matrículas universitarias.

Ante ello, unos 4 mil uniformados de Scotland Yard vigilaron que los manifestantes mantuvieran la calma durante la protesta, ya que los disturbios del pasado verano dejaron en la mira de los medios internacionales a Gran Bretaña.

Las consignas de “educación es un derecho, no un privilegio” fueron la constante que los estudiantes vitorearon durante su paso por las calles de Londres; asimismo, algunos aseguraron que  la privatización de la educación  a la que el gobierno de Gran Bretaña intenta acercarse, son los mismos problemas que atañen a otros países europeos como España.

«Quieren que las leyes del mercado, las mismas que están arruinando Europa, se impongan también en el sistema educativo», advirtió una estudiante de Psicología, Lisa Sterling, publicó El Mundo.