Ximena Zapata
A lo largo de los años, la Catrina, símbolo de México y su tradición del Día de muertos, ha sido retratada de mil maneras: en papel picado, en pintura, en maquillaje y en disfraz, de charra, con huipil, con y sin flores. Sin embargo, nos deja asombrados cuando nos visita cada 2 de noviembre con su clásico vestido largo de cuello alto y su gran sombrero de ala ancha, ambos dignos de la época victoriana.
A pesar de que la Catrina ha pasado por México siendo ícono de la cultura y el folklore, recordándonos que antes que estar de luto estamos de fiesta, no siempre ha sido así. Los orígenes de la Catrina en realidad se remontan a la crítica y la sátira sociopolítica desde la era del Porfiriato. Para comprender mejor su origen, es importante recalcar que, durante las administraciones de Benito Juárez, Sebastián Lerdo de Tejada y Porfirio Díaz, existía un recurso satírico, en el cual, a través de dibujos de esqueletos y cráneos, acompañados de textos críticos, se burlaban de las clases privilegiadas así como de la situación del país.
Asimismo, bajo el mandato de Porfirio Díaz, se popularizó el término «Garbanceros». Este término tenía el fin de mofarse de aquellos que pretendían dejar atrás sus raíces indígenas para verse y sentirse europeos, pues negaban su verdadera ascendencia al renunciar al maíz por vender garbanzos.
De esta manera, en el año 1912, el dibujante José Guadalupe Posadas decidió criticar esta situación. Él dibujó una calaca con un fino sombrero lleno de plumas de avestruz que representaba el estatus económico y a la clase social alta. Sin embargo, la calavera se encontraba sin ropa, haciendo referencia a que también pertenecía a las clases sociales más bajas. A esta obra la llamó «La Calavera Garbancera».
A partir de ahí, la Garbancera fungió como ícono para seguir criticando y satirizando distintas situaciones sociales y políticas, pero no fue hasta el año de 1947 cuando el muralista y pintor mexicano Diego Rivera la inmortalizó en una de sus obras más famosas: Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central.
En dicha obra se pueden observar distintos personajes de la historia de México, pero al centro está La Garbancera agarrada de la mano del mismo pintor de niño, así como de su creador, José Posadas. El muralista decidió darle un giro a la obra original de Posadas al retratar a la Calavera con toda la vestimenta completa por primera vez.
Cabe recalcar que «catrín» era la palabra usada para nombrar a aquellos hombres que vestían finamente, de manera que, al estar la Calavera con una de las vestimentas más elegantes de la época, el muralista decidió renombrarla como «La Catrina.»
Desde ese momento, la imagen de la Flaquita se popularizó y se usó como una bonita manera de representar a la muerte, conectando así con la tradicional fiesta del Día de muertos. A pesar de que la Catrina nos representa dentro y fuera de México con su elegancia, no debemos olvidar sus orígenes. La Catrina es una sátira a la situación del país, en donde más allá de ofendernos unos a otros, nos debemos permitir cuestionarnos sobre el rumbo político que queremos, así como también la hipocresía social que fomentamos de muchas maneras. Que año con año, además de festejar, la Flaquita nos enseñe a criticar y cuestionar al ritmo y son de la fiesta de los muertos.
Links
¿Cuál es el origen de La Catrina? | National Geographic en Español
La Catrina, personaje vivo de México | Presidencia de la República EPN | Gobierno | gob.mx
La Catrina: ¿Cuál es su origen y que significado tiene? | Marca
Otras fuentes consultadas
La Catrina y su historia para el Día de Los Muertos – Los Angeles Times
¿Cuál es el origen de La Catrina, personaje del folclor de México?
*Foto de portada: José Guadalupe Posada | Wikimedia Commons
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