Lado B
Secuelas y persistencias de la COVID-19 también afectan a personas asintomáticas
El nuevo coronavirus es muy agresivo y ha provocado daños persistentes en el corto, mediano y largo plazo, en diferentes órganos y tejidos del cuerpo
Por Valeria Rodríguez @Varona92
21 de julio, 2021
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El SARS-CoV-2 afecta de distintas maneras. Cada persona que se ha contagiado presenta diferentes síntomas o ninguno, y aunque aún se están haciendo más estudios al respecto, se sabe que después de la recuperación pueden quedar persistencias pasajeras o secuelas crónicas. 

Al respecto, el profesor investigador Rafael Bojalil, del Departamento de Atención a la Salud de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Xochimilco, explica que la persistencia es la afectación que dura un determinado tiempo —aunque no se sabe cuánto— en el organismo, y la secuela es un daño que ya no se quita y causa repercusiones importantes en el organismo, pues este es uno de los virus más agresivos que se ha conocido. 

“El virus entra a una gran cantidad de tejidos y los afecta (…) Los pacientes tienen inflamación persistente que provoca daños al recubrimiento de los vasos sanguíneos y estos quedan dañados por la infección viral. El virus tiene capacidad de interactuar con diversos tipos de proteínas, en distintas células, tejidos del organismo y esto provoca un daño permanente o pasajero”, dice Bojalil.

Sin embargo, la Doctora Lilia Cedillo, directora del Centro de Detección Biomolecular de la BUAP, afirma que las persistencias “pueden desaparecer después de las cuatro, ocho o 12 semanas” de la enfermedad. Aunque de acuerdo con la especialista, hay casos en que las secuelas aparecen aún después de ese tiempo y se vuelven crónicas.

Dentro de las persistencias más comunes, la Doctora Cedillo enumera la fatiga, el dolor muscular, el dolor en las articulaciones y el trastorno del sueño; además de las perturbaciones cognitivas, como el pensamiento lento y dolor de cabeza; la depresión y la ansiedad; el sarpullido, la pérdida del gusto y el olfato, así como la pérdida de cabello

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A nivel de órganos, las secuelas pueden afectar a los pulmones, con un proceso de hiper inflamación y formación de trombos, acompañada de tos y la necesidad de oxígeno durante un tiempo prolongado. A nivel cardiaco puede dejar palpitaciones o dolores de pecho. En cuanto al riñón, algunas complicaciones han sido fallas renales; en el páncreas se ha visto que personas que no eran diabéticas ahora lo son.

También en el tracto gastrointestinal puede haber una infección y producir alteraciones (persistencias) como pérdida de apetito, sensación de satisfacción, trastornos de horario para ir al baño, diarrea, estreñimiento y dolor de estómago. 

Las secuelas en personas asintomáticas

Foto: Karolina Grabowska | Pexels

Un estudio en el que participaron casi 2 millones de personas, realizado en Estados Unidos por FAIR Health —organización sin fines de lucro que acumula datos sobre seguros médicos—, encontró que entre quienes no tuvieron síntomas de COVID-19 durante su infección (55 por ciento de las y los pacientes en el estudio), el 19 por ciento acudió a un médico para tratar un nuevo problema de salud al menos 30 días después de saber que tuvo la enfermedad.

“Es menos frecuente que tengan persistencias o secuelas, pero sí las tienen, de hecho son las mismas persistencias o secuelas [que tienen las personas sintomáticas], pero con menos intensidad. Esto pasa bastante tiempo después. Hay personas que pudieron haber sido asintomáticas o tuvieron síntomas (leves) respiratorios o  gastrointestinales, pero no les llamó la atención. Ya cuando recaen y se alargan es cuando se preocupan”, detalla Rafael Bojalil en entrevista para LADO B.

El estudio de FAIR Health detalla que el problema más común de todos los grupos de edad que no tuvieron síntomas fue dolor (de diferentes tipos como neuralgia, inflamación y dolor muscular): este se produjo en el 5 por ciento de las y los pacientes al menos un mes después de su diagnóstico. Otras secuelas son: dificultades respiratorias, colesterol en la sangre, malestar, fatiga e hipertensión. Así como ansiedad, problemas intestinales, problemas cutáneos; niveles altos de azúcar en la sangre, presión arterial; y resultados cardíacos anormales.

Un artículo de CNN en español refiere un estudio que describe que las personas que tuvieron COVID-19 asintomático podrían también presentar secuelas de la enfermedad. “Esto demuestra, dicen los investigadores, que las personas con COVID-19 asintomáticas también pueden sufrir problemas de salud en el futuro, y que no se debe presumir que estas personas tienen un riesgo inherentemente bajo de complicaciones en el futuro,” de acuerdo  con el doctor Elmer Huerta, para CNN en español.

Duración de las secuelas

Foto: Parentingupstream | Pixabay

Hasta el momento, el tiempo que tardarán las persistencias aún es incierto, “considerando que esta enfermedad apareció [tan solo] hace año y medio”, dice Cedillo. “En muchos de los casos todavía se presentan y es muy variable el tiempo para que se quiten”, agrega.

Un estudio realizado por la Societat Catalana de Medicina Familiar i Comunitària (CAMFiC) sobre la persistencia del virus —que aclara que son  síntomas previos o derivados de las secuelas típicas de haber sufrido neumonía—, ofrece un resumen de los datos localizados en sus principales estudios clínicos, respecto a signos y síntomas reportados como COVID-19 persistente: 

Síntomas persistentes en la infección Cuatro semanas Ocho semanas Doce semanas
Fatiga 35% 16% 55%
Dolor torácico 20% 22% 10,8%
Tos 43% 18% 2-16,7%
Dolor abdominal 15%
Náuseas 10%
Vómitos 4%
Diarreas 3%
Diarreas o vómitos 17% 11% 31%
Anorexia 8%
Trastorno de conducta 26,7%
Pérdida de memoria 34,2%

Ante estas secuelas o persistencias, el profesor Bojalil detalla que la fibrosis pulmonar es un caso de secuela que ya no tiene cura. Por ello, tanto él como la Doctora Cedillo recomiendan asistir con una persona especialista para realizar los tratamientos específicos necesarios, dependiendo del daño y de la persona.

 

*Foto de portada: Marlene Martínez

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Autor Lado B
Valeria Rodríguez
Lic. en Ciencias de la Comunicación de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. Me gusta investigar y hablar de diversos temas interesantes.
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