La cercanía de mi cumpleaños trajo el aroma de viejas lecturas. Una de ellas inspiró esta Miss Tape; en especial el siguiente fragmento de Life After God (Douglas Coupland):
[pull_quote_center]…dentro de mí hay sentimientos que necesitan salir con urgencia, supongo. Y eso me alivia porque una de mis grandes preocupaciones de estos últimos años es haber perdido la capacidad de sentir las cosas con la misma intensidad como las sentía cuando era más joven. Da miedo…percibir que tus emociones se alejan flotando y que eso no te importe. Supongo que lo que verdaderamente da miedo es no preocuparse por la pérdida[/pull_quote_center]
Si es real la posibilidad de sentir con menor fuerza a través de los años, ¿no es una fortuna acaso, que ciertas canciones nos hablen con la intensidad de la primera vez, aun después de mil y un escuchas? El resultado del vistazo a mi historia es esta lista que intensea y que mis amigos odiarían si la pusiera en mi fiesta de cumpleaños. Quizá la ponga.
Destaco las letras de todas: filosóficas, ¿cursis?; quizá desesperadas. «I’ll go walking in circles, while doubting the very ground beneath me. Trying to show unquestioning faith in everything«, dice el verso de alguna. Entre ellas, las voces masculinas que más admiro en el mundo: Johnny Indovina, David Sylvian, Adrian Belew, Paul Buchanan y Scott Walker. Ellas (Hope, Jenn, Diana, Anna, Sinéad) son algunas de quienes me han pinchado el espíritu para escribir y cantar mejor. Siempre. Against all odds.
Al final –numás porque #birthdaygirl–, una confesión: con todas estas obras he llorado mucho (incluido el libro de Coupland y, sí, la del burro). Experiencia estética, nostalgia, ridículo, karma, a saber.
Pero me han hecho feliz.
TRACKLIST
EL PEPO