Ha sonado la diana en la trompeta, es la llamada al jolgorio de alegría, a la fiesta de la comunidad donde todos participan, no importa el género o la edad, pequeños en brazos o de la mano, mujeres disfrazadas de Huehues, Turcos, Zacapoaxtlas, Indios, Zoavos o Zapadores, todas y todos comparten el espacio de tradición. La han heredado de abuelos y padres y ahora la transmiten a sus hijos.
La banda toca su música, a su ritmo se mueven los cientos de integrantes del batallón; a su compás suenan las explosiones de los mosquetones, el conjunto de agrupaciones reúne a miles de participantes y a miles de visitantes. En las casa de los generales inicia la fiesta y continuará después del desfile, es el momento de compartir los alimentos, la bebida y la regocijo.
*Aprendiz de sociológo, aficionado a la fotografía, caminante y acompañante de pasos.