Mamana Bibi, de 68 años, fue asesinada en octubre de 2012 mientras recolectaba verduras en los campos de la familia en el noroeste de Pakistán. El gobierno de EEUU no ha reconocido su muerte ni ha hablado con sus nietos y nietas, a pesar de que algunos de ellos presenciaron como caían misiles sobre su abuela.
Este no es el único caso de muertes civiles por ataques de drones, a pesar de que el gobierno estadounidense afirma que las personas fallecidas son “terroristas”.
Amnistía Internacional documentó decenas de matanzas en el área tribal de Waziristán, ubicada al noroeste de Pakistán, la más afectada por ese tipo de ofensivas.
Ante ello, presentó el informe «¿Seré yo el próximo?. Ataques con ‘drones’ de EU en Pakistán», en el que acusa al gobierno de Estados Unidos de llevar a cabo ataques ilegales con aviones no tripulados («drones») en Pakistán, que en algunos casos pueden suponer «crímenes de guerra».
AI revisó 45 ataques efectuados entre enero de 2012 y agosto de 2013 y, entre otras, constató «la falta de transparencia» del gobierno estadounidense en torno a ese tipo de operaciones.
«El secretismo que rodea sus programas de ‘drones’ (también llamados «zánganos» en español) da a la Administración de Estados Unidos licencia para matar fuera del alcance de los tribunales o de los estándares básicos de la legislación internacional», declaró el investigador de Amnistía Mustafa Qadri.
«Es hora de que EU sea transparente sobre su programa y lleve a los responsables de las violaciones ante la justicia», afirma en un comunicado.
Amnistía señala que las víctimas de estos ataques con «zánganos», a menudo civiles inocentes, no pueden aspirar a reclamar reparación si los Estados Unidos «ni siquiera reconocen su responsabilidad por cada uno de los ataques», dio a conocer Milenio.
En su informe, AI revela que, en las ofensivas estudiadas, algunas de las víctimas fueron una abuela de 68 años, Mamana Bibi, que fue asesinada mientras recogía hortalizas rodeada de sus nietos, o 18 jornaleros, entre ellos uno de 14 años, que murieron cuando se reunían para comer tras un día de trabajo.
Por ello, Amnistía Internacional pide al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que explique por qué y bajo qué fundamento jurídico murió Mamana Bibi e ínstale a que inicie una investigación independiente e imparcial sobre su muerte y todos los demás presuntos homicidios ilegítimos derivados de ataques con drones.
Para firmar la petición de Amnistía Internacional, en el siguiente link.
EL PEPO