Desde el 1 de enero pasado, quien descubra una nueva especie vegetal ya no necesita incluir una breve descripción en latín de su hallazgo. En el más reciente Congreso Internacional para la Nomenclatura Botánica, se acordó que también serán validas las descripciones en inglés.
Los nombres de las plantas descubiertas seguirán siendo en latín, o al menos con una terminación latina añadida a otra palabra.
En 1935 se había determinado que “El autor debía dar una descripción –la diagnosis- en latín en la publicación”. El resto del artículo podría ser en cualquier idioma.
EL PEPO