El sábado 19 de mayo, 150 años después de la Batalla de Puebla, Ignacio Zaragoza cabalgó de nuevo por las calles de la angelópolis. Montado en su caballo, el mítico general avanzó rumbo al Zócalo. No se trató de la aparición de un fantasma, sino de una representación a cargo de la teatrera Jesusa Rodríguez, que sirvió para contrastar con las pirotécnicas celebraciones oficiales del 5 de mayo.