Lado B
VI Brigada Nacional de Búsqueda finaliza con hallazgo de fosas clandestinas
Después de dos semanas de trabajo, la VI Brigada Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas terminó su intervención humanitaria en Morelos, entidad que vio nacer al Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad en 2011. Los recientes hallazgos de fosas clandestinas en Yecapixtla abren la posibilidad de que los integrantes de la brigada regresen en un par de semanas
Por Marcos Nucamendi @MakoNucamendi
25 de octubre, 2021
Comparte

A dónde van los desparecidos

Desde la Plaza de Armas de Cuernavaca, lugar emblemático para las víctimas de la violencia en México, la VI Brigada Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas se despidió este domingo de Morelos, un estado marcado por fosas clandestinas, algunas de ellas utilizadas por las propias autoridades. Lugares como Tetelcingo, Jojutla y ahora Yecapixtla forman parte de la geografía del horror.

Las familias que llegaron desde el pasado 9 de octubre, provenientes de diversos estados del país, regresaron a sus lugares de origen con la satisfacción de haberle demostrado a las autoridades locales, estatales y nacionales que se pueden hacer las cosas de otra manera, que ningún paraje es tan amplio como para no desenterrar la verdad y que sí es posible buscar activamente a los desaparecidos.

“La Brigada ha devuelto a Morelos esa esperanza que se generó con el Movimiento por la Paz (con Justicia y Dignidad). La mayoría somos personas que nacimos desde esa voz del dolor”, dijo el pasado viernes, durante una conferencia de prensa, Juan Carlos Trujillo, de la Red de Enlaces Nacionales, integrada por más de 160 colectivos de 26 estados del país.

También puedes leer: Hallan campos de exterminio en Morelos

Lo hizo desde el mismo lugar en donde Javier Sicilia, hace diez años, anunció que no volvería a escribir poesía —el mundo ya no era digno de la palabra—, luego de que su hijo Juan Francisco fuera hallado sin vida, junto con otras seis personas, en el interior de un automóvil abandonado a la altura del municipio de Temixco. La indignación provocada por estos hechos se transformaría en la caravana por la paz, con la que cientos de víctimas de la violencia recorrieron miles de kilómetros, al sur y al norte del país, e incluso al otro lado de la frontera.

“Fue ahí donde nos dieron este ánimo para salir a gritar a los cuatro vientos que teníamos a nuestros hijos desaparecidos”, recordó María Herrera, madre de Juan Carlos y uno de los rostros más visibles de la Brigada Nacional, antes de pedir un minuto de silencio por el hijo de Sicilia, cuyo nombre está inscrito en uno de los pilares del Palacio de Gobierno del Estado de Morelos, hoy convertido en un memorial de víctimas.

María Herrera (derecha) busca a cuatro de sus hijos, desaparecidos entre 2008 y 2010 en Guerrero y Veracruz. / Foto: Marcos Nucamendi

También puedes leer: México rebasa las 4 mil fosas clandestinas, 40% se encontraron en este sexenio

Las fosas clandestinas en Yecapixtla

Quienes participaron en la VI Brigada Nacional confirmaron, entre otras cosas, que en el “campo de exterminio” descubierto a inicios de la semana pasada, en el municipio de Yecapixtla, se registraron diez hallazgos en diversas fosas clandestinas con un número aún indeterminado de restos óseos, pues aún falta que la Fiscalía General del Estado (FGE) termine de procesar el lugar, una antigua mina de arena en el ejido de Mixtlalcingo y que, a decir de su propio personal, era humanamente imposible de resguardar y trabajar.

Las familias, dignamente, les dieron una cachetada con guante blanco. Lo hicieron al remover la tierra, al excavar zanjas de más de tres metros de profundidad y al descubrir las deficientes intervenciones de una Fiscalía que apostó una y otra vez por el desgaste, dudando de su pericia y negándose, en un principio, a exhumar parte de los hallazgos.

Personal del Servicio Médico Forense durante el primer día de exhumación en la mina de Mixtlalcingo.
/ Foto: Marcos Nucamendi

También puedes leer: En menos de un año, México sumó 6 mil desapariciones y más de mil cuerpos en fosas clandestinas

Durante la conferencia de prensa, Tranquilina Hernández, del colectivo Unión de Familias Resilientes Buscando a sus Corazones, pidió a las autoridades que se terminen de exhumar todos los restos de la mina de Mixtlalcingo, en Yecapixtla, que se les identifique plenamente y que puedan regresar con sus seres queridos. “Ya tiene varios años sepultados ahí y no queremos una segunda ni tercera desaparición, queremos un trabajo limpio, y que podamos dar eso que venimos buscando desde el corazón para todas las familias: un poquito de tranquilidad”.

Al hablar de los hallazgos de la Brigada Nacional en Yecapixtla —y ante la posibilidad de que esta regrese en dos semanas para dar seguimiento al caso—, el Fiscal Especializado en Desaparición Forzada de Personas de Morelos, Alejandro Cornejo Ramos, se comprometió a iniciar el proceso de identificación de las personas que sean localizadas en el predio, la búsqueda de sus familias y continuar la exploración del sitio para garantizar que ha sido completamente explorado. “Si hay necesidad de extenderlo (el perímetro), así se hará”, dijo en entrevista.

Integrantes de la brigada anunciaron que es posible que regresen a Morelos durante las próximas semanas, para continuar los trabajos en las fosas localizadas en Yecapixtla. / Foto: Marcos Nucamendi

 

Continuar leyendo en A dónde van los desaparecidos

*Foto de portada: Marcos Nucamendi

Comparte
Autor Lado B
Marcos Nucamendi
Suscripcion